El jefe de derechos humanos de las ONU hizo un llamado el viernes a los ataques a los manifestantes estudiantiles en Bangladesh como “impactantes e inaceptables”, ya que el número de muertos por la represión de las autoridades superó la marca de 100.
Casi a diario, a principios de julio, comenzaron las manifestaciones contra los planes de reintroducir cupos de trabajo en el sector público, que fueron abolidos en 2018 tras protestas estudiantiles anteriores.
Los estudiantes exigen un sistema basado en el mérito.
¿Qué dijo el jefe de derechos humanos de la ONU, Volker Turk?
“Estoy profundamente preocupado por la violencia de esta semana en Bangladesh, que resultó en informes de docenas de muertes y cientos de heridos. Los ataques contra los manifestantes estudiantiles son particularmente impactantes e inaceptables”, dijo el jefe de derechos humanos de la ONU, Volker Turk, en un comunicado.
“Debe haber investigaciones imparciales, rápidas y exhaustivas sobre estos ataques, y los responsables deben rendir cuentas”, continuó el comunicado.
Turk dijo que estaba muy preocupado por los informes sobre el despliegue de unidades policiales paramilitares, que tienen “largos expedientes de violaciones”.
Instó al gobierno a tomar medidas para garantizar la seguridad de los estudiantes en protestas pacíficas y a garantizar el derecho a la libertad de reunión sin temor a ataques.
¿Qué sucedió el viernes?
La violencia continuó en la capital, Daca, el viernes mientras varios cientos de estudiantes bloquearon carreteras y se enfrentaron con la policía, un día después del día más sangriento de las protestas.
La policía lanzó gas lacrimógeno para dispersar a los manifestantes en algunas áreas, dijeron periodistas de la agencia de noticias Reuters. Un reportero dijo que se podían ver muchos incendios en toda la ciudad.
Un recuento de la agencia de noticias AFP, basado en las víctimas de hospitales de todo el país, situó el número de muertos en 105, el viernes por la noche. Incluían al menos 52 personas muertas el viernes, según una lista elaborada por el Hospital Colegio Médico de Dhaka.
El gobierno no ha publicado una cifra para el número de muertos.
También el viernes, la fuerza policial de Daca prohibió todas las reuniones públicas por el día, por primera vez desde que comenzaron las protestas.