Reclamaciones de responsabilidad y ataques mortales
El Ejército de Liberación de Balochistán (BLA) asumió la responsabilidad de una serie de ataques mortales en la provincia de Balochistán, suroeste de Pakistán, el lunes, que resultaron en al menos 70 muertes, incluidas 14 de soldados. Los asaltos coordinados tuvieron como objetivo estaciones de policía, vías de ferrocarril y carreteras.
Incidente más mortífero
En el incidente más mortal, los militantes del BLA tomaron control de una carretera y dispararon a al menos 23 personas, la mayoría trabajadores de la vecina provincia de Punjab, en lo que el ministro principal de la provincia describió como “tiros estilo ejecución”.
Reacciones del gobierno pakistaní
El primer ministro paquistaní, Shehbaz Sharif, afirmó que los separatistas desean interrumpir los proyectos de desarrollo del Corredor Económico China-Pakistán (CPEC) que tienen como objetivo expandir la presencia de Pekín en Pakistán y en toda Asia Central y Meridional para contrarrestar la influencia de Estados Unidos y la India en la región. Sharif prometió retaliación por la violencia, que coincidió con la visita de un alto general chino a la capital pakistaní, Islamabad.
Contexto de los Baloch
Los Baloch son un grupo étnico musulmán sunita que vive a ambos lados de la frontera Irán-Pakistán y también en partes del sur de Afganistán. Balochistán constituye la mayor parte de esta región, seguido de la provincia de Sistan y Baluchistán en el lado iraní. Con un tamaño aproximado al de Francia, el área es escasamente poblada por unos 9 millones de Baloch organizados en tribus.
Durante décadas, los esfuerzos por la autonomía o la independencia han sido enfrentados con violenta represión en ambos lados de la frontera. En Pakistán, dichos esfuerzos son vistos como intentos de fragmentar la nación, mientras que en Irán, la situación se complica aún más porque los Baloch son una minoría musulmana sunita en un país predominantemente chiita.
Descontento entre los Baloch
Más de 10,000 Baloch han desaparecido en Pakistán desde 2011, según Amnistía Internacional. La región es rica en recursos naturales como oro, diamantes, plata y cobre, pero la población local sigue siendo una de las más pobres en Irán y Pakistán.
El BLA es el grupo militante Baloch más grande y ha estado luchando contra el gobierno paquistaní durante décadas, buscando la independencia de Balochistán y la expulsión de China. Los militantes del BLA han llevado a cabo ataques, especialmente contra las fuerzas de seguridad pakistaníes y el proyecto CPEC de Pekín. Los Baloch étnicos, que constituyen la mayoría en Balochistán, están descontentos con el gobierno paquistaní por lo que perciben como una explotación injusta de los recursos de su región.
Las acusaciones de explotación han alimentado la insurgencia del BLA y han dado lugar a un aumento de las actividades militantes, que han escalado en los últimos días. Los ataques del lunes coincidieron con el 18º aniversario de la muerte de Nawab Akbar Bugti, un antiguo líder nacionalista Baloch.
Escalación alarmante
Los analistas consideran que los últimos ataques coordinados son alarmantes por su escala sin precedentes e intensidad, generando serias preocupaciones sobre los impactos en la seguridad. “Estos son ataques extremadamente significativos por su escala, en términos de número de fatalidades, alcance geográfico de los ataques y amplia variedad de objetivos, tanto civiles como de seguridad”, comentó Michael Kugelman, experto en Asia del Sur del Centro Woodrow Wilson para Académicos.
Kiyya Baloch, periodista y comentarista que ha cubierto extensamente Balochistán, afirmó que los ataques del lunes marcaron un nuevo nivel de seriedad debido a su planificación y coordinación meticulosas.
Impacto en los movimientos de protesta
Durante casi dos décadas, grupos armados Baloch han estado involucrados en un conflicto prolongado contra las fuerzas de seguridad paquistaníes. En este tiempo, varios movimientos pacíficos por los derechos en Balochistán han ganado apoyo masivo, abogando por los derechos civiles, políticos y socioeconómicos de los Baloch y organizando grandes protestas.
Los analistas temen que los activistas pacíficos sean los que más sufran debido a estos ataques y cualquier represalia del gobierno pakistaní. “Tememos que, al contrarrestar la nueva ola de violencia, el estado también apunte a nuestro movimiento pacífico”, comentó Hidayat ur Rehman Baloch, un activista de Gwadar.
Kugelman advirtió que existe el riesgo de que Islamabad use imperativos de lucha contra el terrorismo como pretexto para reprimir la disidencia pacífica. “No sería la primera vez que esto ocurre, pero añadiría tensión a una situación ya crítica en Balochistán, dada la amenaza de la militancia y el creciente sentimiento anti-gubernamental que ha resultado en grandes protestas pacíficas en los últimos meses”, subrayó.
“Baloch ha señalado que el gobierno ha intentado vincular a los activistas Baloch pacíficos con militantes durante mucho tiempo, por lo que entiendo que tales ataques definitivamente serán utilizados por el gobierno.”
Fuente y créditos: www.dw.com
Cats: World