El mercado de Gouro es un lugar popular justo en el centro de Abiyán, capital económica de Costa de Marfil. Es aquí donde casi todos los vendedores de cultivos alimenticios vienen a abastecerse.
Pero en la actualidad, algunos de los productos básicos escasean: es difícil encontrar tomates, chiles, berenjenas, quimbombó o plátanos. Y cuando se encuentran, los precios son altos.
Esto causa mucha consternación entre los clientes como Louisette Kouame, quien ha venido a comprar ingredientes para cocinar para su familia.
”No podemos permitirnos nada,” dijo Kouame a DW. “Si vienes hoy, un kilo de cebollas costará 500 francos CFA (US $0.83). Al día siguiente, son 800 francos. Un kilo de tomates cuesta 2,000 francos. No podemos preparar nada.”
Viviane Tagro, propietaria de un restaurante, también enfrenta dificultades similares.
“Normalmente, puedo conseguir todo lo que necesito por 100,000 francos CFA [US $167]. Pero hoy en día, eso no es suficiente, así que no compré nada. Solo cuatro tomates a 500 francos,” dijo Tagro.
Condiciones difíciles exacerbadas por el clima
La principal causa de esta tendencia inflacionaria reciente es el hecho de que Costa de Marfil tiene que importar muchos de estos productos.
Para cebollas, tomates y papas, Costa de Marfil depende de productos de Burkina Faso, Níger y Marruecos. El comercio intrarregional se ha visto afectado por la creciente amenaza islamista en la región del Sahel, así como por los gobiernos liderados por juntas militares de Malí, Níger y Burkina Faso que abandonaron el bloque regional de la CEDEAO.
Yvonne Goley Lou, productora local de alimentos y presidenta del mercado de Gouro en Abiyán, dice que las altas temperaturas desde el inicio del año han estado exacerbando la escasez de frutas y verduras.
”Hay una cosa que debemos entender,” dijo Goley a DW. “La producción de alimentos no se ha modernizado. Se ha hecho de una forma arcaica desde hace años. Trabajamos a mano, regamos con regaderas y tenemos un problema de lluvias; no llueve. Por lo tanto, nuestros rendimientos han disminuido.”
También advirtió que las cosas no van a mejorar: “Con el calentamiento global que estamos viendo ahora, ¿puedes regar con una regadera para poner la cantidad adecuada de agua en la planta? Si tienes un hectárea, ¿puedes regarla con la regadera durante todo un día?”
Aumento de precios por más de una razón
Ranie-Didice Bah-Kone, Secretaria Ejecutiva del Consejo Nacional de Lucha contra el Alto Costo de Vida (CNLVC), por su parte, dice que al menos hay algo de esperanza en el horizonte.
”Lo que debes saber es que los productos alimenticios son estacionales,” dijo a DW. “Cuando es la temporada, están en alta disponibilidad. Alta disponibilidad significa precios más bajos. Así que en unas pocas semanas, las cosas volverán a la normalidad.”
CNLVC es presidido por el Primer Ministro y el Ministro de Comercio, y fue creado para asegurar transparencia para los alimentos básicos de Costa de Marfil. Los precios y tendencias día a día se muestran en su sitio web para que las personas puedan tomar decisiones informadas.
Sin embargo, las predicciones de Bah-Kone pueden no aplicarse a todos los contextos, especialmente para los productos importados, según Soumahoro Ben N’Faly, Presidente de la Asociación de Consumidores Activos de Costa de Marfil.
Insiste en que los controles policiales regulares contribuyen a un aumento de los precios, con corrupción y extorsión que presuntamente empujan los precios a niveles desorbitados.
“Mientras tanto, los precios de los productos básicos no agrícolas como arroz, aceite, azúcar y leche también están en alza, al igual que los costos de transporte y alquiler de propiedades comerciales.
La sensación general entre los marfileños, cuando se trata de la inflación y el costo de vida, es que las cosas probablemente empeorarán antes de mejorar.
Fuente y créditos: www.dw.com
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