Fueron filósofos, banqueros y músicos: la familia judía Mendelssohn dejó huellas distintivas en la vida intelectual, económica y cultural de Alemania desde el siglo XVIII.
Sin embargo, el cenit de la familia terminó abruptamente en 1933, cuando los nazis tomaron el poder en Alemania. La histórica vida de los Mendelssohn se conmemora en un edificio que les perteneció, en el centro de Berlín.
La Mendelssohn-Remise, que se encuentra en una calle lateral cerca de la Plaza Gendarmenmarkt de Berlín, fue originalmente parte de un banco y luego se utilizó como cochera. Hoy, este sitio histórico alberga un museo privado que organiza conciertos, lecturas, discusiones y visitas guiadas.
De banco a sala de conciertos
Sin embargo, la posición del museo es segura solo hasta finales de 2024. El propietario del edificio, una empresa de fondos de cobertura, ha aumentado drásticamente el alquiler y está presionando al museo para que negocie un contrato que incluya una rescisión a corto plazo. El director de la Mendelssohn-Remise, Thomas Lackmann, dijo a DW que estas condiciones harán que el funcionamiento del museo sea imposible.
Esta joya que preserva la historia judía alemana — y su vida cultural actual — ha sido financiada principalmente durante los últimos 20 años a través de la Sociedad Mendelssohn con donaciones privadas y cuotas de membresía. La sociedad fue fundada en 1967 y es responsable de la gestión del museo y de la organización de los diversos programas en el salón de exposiciones.
“Si no llega un apoyo institucional que pueda ayudar a compensar nuestro déficit presupuestario estructural, este sitio conmemorativo se convertirá en un taller de historia a demanda,” dijo Lackmann, describiendo el dilema. El alquiler del edificio está previsto que aumente un 25% hasta alrededor de €80,000 ($86,000) anualmente.
“El periodo de aviso de 12 meses significará que ya no podemos realizar un trabajo sensato en el museo,” dijo Lackmann. La opción de un periodo de aviso de tres años que se ofrece también está fuera de discusión, añadió, ya que requeriría una tarifa de rescisión adicional de €28,000.
El cierre de la Mendelssohn-Remise ‘dañaría la cultura de la memoria’
Si la Mendelssohn-Remise se viera obligada a cerrar sus puertas a finales de este año, el tradicional festival “La Última Rosa del Verano”, presentado a mediados de agosto, también marcaría el final de una serie de conciertos de música de cámara de primer nivel.
Este año, su programa incluye actuaciones de estrellas internacionales como Vladimir Stoupel al piano y Judith Ingolfsson en la viola, así como un cuarteto de piano compuesto por Fanny Hensel, hermana de Felix Mendelssohn Bartholdy.
Durante su vida, Hensel, que compuso más de 450 obras, permaneció a la sombra de su hermano más famoso. Bustos de los dos hermanos nacidos en Hamburgo dan la bienvenida a los visitantes en el idílico patio de la Mendelssohn-Remise, con su fuente y bancos.
El periodo más creativo de los dos compositores se pasó en Berlín, y en Leipzig, donde Felix fue el Kapellmeister o director de la Gewandhaus.
“Hay museos Mendelssohn en Hamburgo y Leipzig. Pero pronto, Berlín no tendrá uno,” dijo Lackmann, añadiendo que tal realidad “dañaría la cultura de la memoria.”
El nombre de Moses Mendelssohn representa la superación del odio y la construcción de puentes entre religiones. Filósofo y polímata, Moses Mendelssohn moldeó la Ilustración en el siglo XVIII.
Lackmann está particularmente interesado en recordar al público esta tradición, llamándola “un legado de tolerancia, pero también de responsabilidad cívica.”
Sin financiación permanente del gobierno federal
La plétora de historias fascinantes de la extensa familia Mendelssohn ilustra cómo se puede participar en la sociedad, dijo Lackmann, que también es periodista y autor. Cree que el gobierno tiene el deber de garantizar la preservación de la filosofía mendelssohniana.
DW consultó sobre la situación en la oficina de Claudia Roth, comisionada de cultura y medios de Alemania, o BKM. Un portavoz respondió: “No es posible financiar institucionalmente desde el presupuesto del BKM, pero la sociedad podría, en principio, solicitar financiación del Fondo Cultural de Capital.”
Sin embargo, dado que ese organismo está orientado hacia la financiación de proyectos, Lackmann cree que solo podría proporcionar asistencia temporal a la Mendelssohn-Remise.
La oficina de Roth no deseó comentar sobre la importancia de la Mendelssohn-Remise para la vida cultural e intelectual de Berlín — ni sobre si Berlín podría permitirse prescindir de este sitio histórico, con su conexión inmediata con la familia Mendelssohn. En ambos casos, la oficina insinuó que la responsabilidad recaía en el gobierno municipal, no a nivel federal.
La consulta de DW a Joe Chialo, senador de Berlín para la cultura y la cohesión social, también recibió una respuesta de un portavoz: “Preservar la Mendelssohn-Remise como un lugar de encuentro, evento y exposición es una preocupación importante para nosotros. Desde su apertura en 2004, la Mendelssohn-Remise se ha convertido en un lugar de extraordinaria importancia cultural y política.”
Chialo ha enviado una carta al propietario del edificio, solicitando que se continúe el acuerdo de alquiler con la Sociedad Mendelssohn en sus términos anteriores.
“Además, actualmente estamos haciendo consultas para determinar si el estado de Berlín puede apoyar eventos en la Remise.”
Apelación por donaciones
La oficina de Chialo dijo que no podía prometer apoyo financiero a largo plazo, y parece que las posibilidades de rescate disminuyen con cada día que pasa. Lackmann y su equipo de voluntarios ahora solo pueden esperar ayuda de otras fuentes, y ya han lanzado apelaciones por donaciones privadas.
Recientemente, un cheque llegó de EE. UU. de los patrocinadores de una casa de ópera americana, que habían estado en Berlín y habían organizado su propio concierto en la Mendelssohn-Remise. “Creo que las personas externas tienen una visión mucho más sensible y entusiasta; pueden ver lo especial que es este lugar,” dijo Lackmann.
Ahora, Lackmann espera que una persona adinerada pueda comprar todo el complejo del edificio. No solo como una inversión, sino con un poco de idealismo: para continuar la tradición de la Ilustración.
Este artículo fue escrito originalmente en alemán.
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Fuente y créditos: www.dw.com
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