Cómo evitar el deber de jurado
Entonces, ¿quieres evitar el deber de jurado? Claro, podrías usar una camiseta que diga “Culpable hasta que se demuestre lo contrario” o proclamar en voz alta que la frecuencia de tus movimientos intestinales hará que estar sentado en la corte sea imposible. Antes de recurrir a trucos y broma, hay maneras completamente legítimas de evitar el deber de jurado. Porque seamos realistas: pocos de nosotros estamos emocionados de ver un sobre en el correo que dice “citación”. Dado que el proceso de citación está diseñado para ser lo más aleatorio posible, nunca sabes cuándo llegará esa carta temida. Afortunadamente, es posible que aún no necesites reorganizar tu agenda. Hay herramientas prácticas a tu disposición para evitar el deber de jurado.
Reclamos que pueden ayudar a evitar el deber de jurado
Para encontrar una manera legítima de salir de tu citación, comienza por buscar cualquier cosa que te impida estar físicamente presente o que indique que no podrías ser un jurado imparcial. Si alguna de las siguientes excusas se aplica a tu situación, puedes presentar una respuesta por escrito a tu citación que exponga claramente todas las razones por las que no puedes servir en esa fecha. A continuación, explicamos el tipo de pruebas que requieren diferentes excusas. Ten en cuenta que esta carta no es una garantía de que hayas logrado salir del deber de jurado, ya que cada corte local tiene sus propios procedimientos para la redacción de esta carta y la consideración de tu solicitud.
Dificultades económicas
Puede que seas dueño de un pequeño negocio que no puede funcionar sin tu presencia, o quizás tu familia sufrirá una dificultad financiera significativa si eres seleccionado como jurado. Las dificultades financieras son un reclamo legítimo para salir de tu citación, pero necesitarás varios documentos además de tu carta de excusa. Deberás proporcionar tus formularios fiscales actuales que muestren tu situación financiera, documentación que indique tu estado laboral actual (salarios, horas, etc.) y cualquier documento que muestre tu incapacidad para brindar apoyo a ti o tu familia como resultado del servicio de jurado.
Dificultades médicas y otros casos
Si tienes una limitación médica legítima, los tribunales no pueden esperar que te presentes. No tienes que probar que estás en coma. Por ejemplo, si tienes el síndrome del intestino irritable (IBS), podrías explicar por qué esto te impediría sentarte y concentrarte en un caso durante períodos largos. Los que buscan reclamar una dificultad médica deben proporcionar una declaración firmada de un médico licenciado que indique tu condición y cuánto tiempo se espera que dure.
Si eres un cuidador, es posible que tengas dependientes cuyos cuidados no pueden quedarse solos todo el día mientras asistes a tu citación. Si eres cuidador de alguien menor de 16 años, debes proporcionar copias de los certificados de nacimiento de los niños a tu cuidado y una explicación de por qué no hay otras opciones para ellos mientras estás en el deber del jurado.
Los estudiantes de tiempo completo y los ciudadanos mayores pueden estar exentos de manera similar si pueden proporcionar la documentación adecuada.
Cómo posponer el deber de jurado
Generalmente puedes cambiar tu fecha de servicio de jurado simplemente pidiendo, sin necesidad de dar explicaciones. A partir de ahí, puedes elegir tu propia fecha de deber, lo cual puede reducir tu tiempo en la corte a solo una o dos horas en vez de un día o una semana.
Puede que puedas posponer el servicio de jurado por hasta seis meses, de dos a tres veces después de haber sido citado. Las reglas varían por estado, pero la mayoría te permitirá reprogramar para una fecha posterior. Por ejemplo, en Nueva York, puedes posponer tu servicio una vez en línea o llamando a un número gratuito al menos una semana antes de tu fecha de servicio.
Qué decir para no ser elegido para el deber de jurado
Ten en cuenta que tu citación inicial es solo para asistir al día de selección de jurados, no al servicio del jurado en sí. Si no puedes evitar asistir a la selección, aquí hay algunas ideas para asegurarte de que ningún abogado quiera que estés en su sala de tribunal.
Una última advertencia: existen consecuencias serias por las travesuras relacionadas con el deber de jurado. Las solicitudes para ser excusado son revisadas por los tribunales caso por caso. No seas un no-show o abandones la selección de jurados temprano asumiendo que tu razonamiento es válido; podrías terminar con una multa elevada, y existe la posibilidad de que el tribunal te sentencie a hasta dos años de cárcel por desacato al tribunal.
Fuente y créditos: lifehacker.com
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