Factores a considerar al comprar un wok
Cuando piensas en un wok, podrías imaginar un gran tazón oscuro envuelto en llamas, pero esto no es más que una pequeña parte de la versatilidad de este utensilio de cocina. Aunque no son ampliamente utilizados en la cocina occidental, los woks presentan una variedad de estilos y formas que se adaptan a tu estilo de cocina. Aquí tienes algunas consideraciones al momento de adquirir uno.
Woks tradicionales redondos vs. woks de fondo plano
Los woks tradicionales tienen un fondo redondo y lados inclinados que se ensanchan dramáticamente. El fondo curvado y los lados inclinados son clave para revolver, atrapar y voltear los ingredientes, lo que los convierte en herramientas flexibles para hervir sopas, saltear, guisar, vaporizar o freír. El área en forma de cuenco en la parte inferior es la más caliente y permite que los líquidos se concentren. A medida que cocinas, los ingredientes pasan por esta área y se cubren de salsa o grasa. Sin embargo, este tipo de wok requiere un soporte conocido como anillo de wok para mantenerse estable sobre la fuente de calor. Son ideales para cocinar a la llama abierta o en una estufa de gas.
Los woks de fondo plano, por otro lado, tienen lados amplios y un fondo en forma de círculo de cinco o seis pulgadas de diámetro. Esta forma permite voltear ingredientes fácilmente y colocar el wok plano sobre la estufa para atender otras cosas. Aunque pierdes un poco de la facilidad de revolver que ofrece un fondo curvado, es un tipo adecuado para cocinas planas, eléctricas o de inducción, ya que necesitan hacer contacto directo con la fuente de calor para funcionar.
Materiales de woks: acero al carbono, acero inoxidable, hierro fundido y antiadherentes
Existen varios materiales para los woks: acero al carbono, acero inoxidable, antiadherente y hierro fundido. Uno de los sabores únicos que se pueden obtener al cocinar en un wok es el característico “wok hei”, que es una combinación de ingredientes caramelizados con aceite ahumado.
Los woks de acero al carbono son ligeros, delgados, duraderos y muy sensibles al calor, lo que los convierte en la opción preferida por los chefs. Su precio es generalmente bajo, aunque requieren ser sazonados antes de usarlos. Por el contrario, los woks antiadherentes no son ideales para el “wok hei” y su recubrimiento puede degradarse a altas temperaturas. Los de hierro fundido son excelentes para altas temperaturas y retención de calor, pero pueden ser pesados. Finalmente, los woks de acero inoxidable no son recomendados para este tipo de cocina, ya que no se calientan rápidamente ni permiten la manipulación adecuada de los ingredientes.
Estilos de mango del wok
Los mangos que elijas dependen principalmente de tu estilo de cocina. Hay tres variedades comunes: un mango largo, un mango largo y uno corto en el lado opuesto, o dos mangos cortos en lados opuestos.
Si planeas saltear, un wok con un mango largo es ideal. Este tipo de mango ofrece una mejor palanca para movimientos más grandes y es útil para cocinar a altas temperaturas. Los mangos cortos, en cambio, son mejores para levantar y verter. Si no estás seguro de qué estilo elegir, te sugiero optar por uno que tenga tanto un mango largo como uno corto para tener opciones.
Fuente y créditos: lifehacker.com
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