La decisión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea
El máximo tribunal de la Unión Europea dictó el viernes que algunas de las reglas de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) están en conflicto directo con la legislación de la unión.
La sentencia se emitió después de que el exjugador internacional francés Lassana Diarra impugnara legalmente las reglas de la FIFA en relación con un conflicto con un club ruso de 2014.
Citando la legislación relacionada con la libertad de movimiento, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), con sede en Luxemburgo, dijo en un comunicado: “Las reglas en cuestión son tales que impiden la libre circulación de futbolistas profesionales que desean desarrollar su actividad al ir a trabajar por un nuevo club”.
El origen del desafío legal
Diarra firmó un contrato de cuatro años con el Lokomotiv de Moscú en 2013, el cual fue rescindido un año después porque el mediocampista defensivo supuestamente no estaba satisfecho con los recortes salariales.
Lokomotiv de Moscú luego solicitó a la cámara de resolución de disputas de la FIFA una compensación, mientras que Diarra presentó una contrademanda solicitando compensación por salarios no pagados.
El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) dictaminó que el club ruso rescindió el contrato con Diarra “con causa justificada” y el jugador fue condenado a pagar €10.5 millones ($11.2 millones).
Los argumentos de Diarra contra la FIFA
A pesar de la decisión del TAS en su contra, Diarra realizó dos reclamos adicionales contra la FIFA, afirmando que su búsqueda de un nuevo club se vio obstaculizada por las reglas de la FIFA.
El reglamento de la FIFA sobre el estatus y transferencias de jugadores (RSTP) indica que un jugador que rescinde un contrato antes de su término “sin causa justificada” es responsable de pagar compensación al club.
Además, si Diarra se unía a un nuevo club, ambos serían responsables del pago de dicha compensación.
Afirmó que un potencial acuerdo con el club belga Charleroi no se concretó debido a las reglas de la FIFA y demandó a FIFA y a la federación belga en un tribunal belga por daños y pérdida de ingresos de €6 millones ($7 millones).
Con la demanda aún en curso en los tribunales belgas, el caso fue remitido al TJUE para un fallo, que afirmó que las reglas de la FIFA obstaculizan la libre circulación de jugadores y están diseñadas para restringir, e incluso prevenir, la competencia transfronteriza.
¿Cuál podría ser el impacto de la sentencia?
Se siente que este fallo podría tener implicaciones de gran alcance, permitiendo a los jugadores dejar su club sin temor a quedar atrapados legalmente después. Algunos han sugerido que tiene el potencial de ser otro fallo Bosman, refiriéndose a Jean-Marc Bosman, quien cambió el fútbol para siempre en 1995 cuando su caso ayudó a los jugadores a dejar libremente un club al final de su contrato.
Sin embargo, dado que el caso regresa ahora a los tribunales belgas, la sentencia de Diarra aún no ha llegado a su veredicto final, por lo que las implicaciones siguen siendo inciertas.
Reacciones a la sentencia
FIFPro, que apoyó a Diarra en su desafío, dio la bienvenida a la decisión, afirmando en un comunicado en la plataforma de redes sociales X: “El TJUE acaba de emitir un fallo importante sobre la regulación del mercado laboral en el fútbol (y, más generalmente, en el deporte), que cambiará el panorama del fútbol profesional”.
Diarra y la FIFA aún no han comentado.
Fuente y créditos: www.dw.com
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