X trabaja con un grupo de consultoría republicano
X parece estar colaborando con un conocido grupo de consultoría republicano, aparentemente para manejar la comunicación en torno a la suspensión de la plataforma de redes sociales en Brasil. Cuando WIRED envió un correo electrónico a X para solicitar comentarios sobre la rápida evolución de la situación en Brasil, la respuesta vino de Michael Abboud, el director general de la firma de consultoría y relaciones públicas conservadora Targeted Victory. Según su LinkedIn, Abboud trabajó para el Departamento de Estado en el último año de la administración Trump y fue secretario de prensa de la campaña del ex presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy.
Contratos y estadísticas de Targeted Victory
Targeted Victory ha tenido contratos con varias campañas republicanas y comités de acción política (PAC) esta temporada electoral por un total de más de $75 millones, según OpenSecrets. El mayor cliente del grupo es el Comité Nacional Republicano, que gastó $11,128,739 en la firma entre enero de 2023 y mayo de 2024. En su respuesta por correo electrónico, Abboud se refirió a una declaración de la empresa X sobre la suspensión de la plataforma en Brasil y dijo que contactaran con más preguntas.
Postura política de Elon Musk
Elon Musk, propietario de X, se ha vuelto más explícito sobre sus opiniones políticas personales en los últimos meses. En julio, poco después del intento de asesinato al ex presidente Donald Trump, Musk declaró que respaldaría su candidatura a la presidencia. Luego mencionó que establecería un PAC para apoyar a Trump con un total de $45 millones por mes (más tarde retrocedió sobre la cantidad exacta). WIRED se puso en contacto con Targeted Victory y Abboud directamente, y ninguno respondió de inmediato a la solicitud de comentarios.
Desafíos legales y situación en Brasil
X no sería la primera empresa tecnológica en trabajar con el grupo. En 2022, un reportaje de The Washington Post encontró que Meta había contratado a Targeted Victory para llevar a cabo una campaña que buscaba deteriorar la opinión pública sobre TikTok. La campaña de comunicación se centró en enmarcar a TikTok, que es propiedad de la empresa china ByteDance, como una amenaza para la privacidad de los estadounidenses y la salud mental de adolescentes y niños.
Una respuesta por correo electrónico de Targeted Victory en nombre de X es particularmente notable; cuando los periodistas contactan al equipo de prensa de X, rara vez reciben una respuesta. Cuando Musk tomó el control de Twitter en 2022, uno de sus primeros movimientos como CEO fue despedir a un número considerable de los 6,000 empleados de la empresa. Este movimiento no solo incluyó a la gran mayoría del equipo de confianza y seguridad de la plataforma, las personas que mantienen la plataforma libre de discursos de odio y desinformación, sino también al equipo de comunicaciones de la empresa.
Durante casi un año, la respuesta automática al correo de prensa devolvía el emoji de caca. Más recientemente, la respuesta automática dice “Ocupado ahora, por favor revise más tarde”. Pero X y Musk han atravesado un tiempo inusualmente complicado ante la opinión pública en las últimas semanas. Después de que X violara una orden judicial de abril del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil que requería que la empresa eliminara ciertas cuentas y contenido que el tribunal dijo que difundía desinformación sobre la integridad de las elecciones en el país, el juez Alexandre de Moraes ordenó bloquear el acceso a la plataforma en Brasil. El país es el tercer mercado más grande de X, y durante meses, Musk ha criticado a Moraes en línea, llamándolo dictador, acusando al tribunal de censura e incluso comparándolo con el villano de Harry Potter, Lord Voldemort. Mientras tanto, Nick Pickles, el jefe de asuntos globales de la empresa, anunció el jueves que renunciaba, y los inversores están diciendo que sus inversiones en la empresa están funcionando sustancialmente peor de lo que se había predicho.
Fuente y créditos: www.wired.com
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