X, anteriormente conocido como Twitter, ha declarado que espera ser bloqueado en Brasil después de no cumplir con un plazo para nombrar un nuevo representante legal para la empresa. La red social cerró su oficina en el país a principios de este mes, alegando que su representante había sido amenazada con arresto si no cumplía con órdenes que la compañía describió como “censura”.
La disputa que se lleva meses comenzó cuando el juez del Tribunal Supremo, Alexandre de Moraes, ordenó en abril la suspensión de decenas de cuentas de X por supuestamente difundir desinformación. El propietario de X, Elon Musk, ha amenazado con reactivar las cuentas y ha descrito al juez Moraes como un “tirano” y un “dictador”.
El juez Moraes dio a X 24 horas para nombrar un nuevo representante legal o enfrentar la suspensión, siendo el plazo justo después de las 20:00 hora local (23:00 GMT) del jueves. La orden establecía que una prohibición se mantendría vigente hasta que X nombrara a un representante legal en el país y pagara multas por presuntas violaciones a la ley brasileña. Sin embargo, en una publicación de una de sus cuentas oficiales poco después de que expirara el plazo, X dejó claro que no había cumplido con la orden.
“Pronto, esperamos que el juez Alexandre de Moraes ordene el cierre de X en Brasil, simplemente porque no cumplimos con sus órdenes ilegales para censurar a sus oponentes políticos”, decía la publicación. “El tema fundamental aquí es que el juez de Moraes exige que incumplamos con las propias leyes de Brasil. Simplemente no lo haremos”. X aseguró que no cumpliría “en secreto con órdenes ilegales”, añadiendo que publicaría las demandas del juez en los próximos días “por razones de transparencia”.
El juez Moraes había ordenado que se bloquearan las cuentas de X acusadas de difundir desinformación – muchas de ellas de partidarios del ex presidente de derecha Jair Bolsonaro – mientras estuvieran bajo investigación. Afirmó que los representantes legales de la empresa serían responsables si se reactivaban cuentas.
Mientras tanto, las cuentas bancarias de la empresa de internet satelital de Musk, Starlink, han sido congeladas en Brasil tras una orden del Tribunal Supremo del país. Starlink respondió con una publicación en X que decía que “la orden se basa en una determinación infundada de que Starlink debería ser responsable de las multas impuestas – inconstitucionalmente – a X”. Musk también declaró en X que “SpaceX y X son dos compañías completamente diferentes con accionistas distintos.” Starlink es una subsidiaria de la firma de cohetes de Musk, SpaceX.
En 2022, el gobierno del entonces presidente Bolsonaro le dio luz verde a Starlink para operar en Brasil. Como el país más grande de América del Sur, Brasil y sus regiones remotas en la Amazonía tienen un gran potencial para Starlink, que se especializa en ofrecer servicios de internet a áreas aisladas.
El juez Moraes ganó prominencia tras sus decisiones de restringir las plataformas de redes sociales en el país. También está investigando al señor Bolsonaro y sus partidarios por sus roles en un presunto intento de golpe de estado el 8 de enero del año pasado.
X no es la primera empresa de redes sociales que enfrenta presión de las autoridades en Brasil. El año pasado, Telegram fue prohibido temporalmente por su falta de cooperación con solicitudes para bloquear ciertos perfiles. El servicio de mensajería de Meta, Whatsapp, también enfrentó prohibiciones temporales en 2015 y 2016 por negarse a cumplir con solicitudes policiales de datos de usuarios.
Fuente y créditos: www.bbc.com
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