El Departamento de Justicia ha acusado a Sue Mi Terry, ex analista de la CIA y alta funcionaria del Consejo de Seguridad Nacional, de actuar como agente secreta para el servicio de inteligencia de Corea del Sur a cambio de regalos de lujo.
Terry, de 54 años, aceptó regalos de lujo, como bolsos, comidas caras en restaurantes de sushi y $37,000 de financiamiento para su programa de política pública sobre asuntos coreanos a cambio de promover posiciones del gobierno surcoreano durante apariciones en medios, compartir información privada con oficiales de inteligencia y facilitar reuniones para que funcionarios surcoreanos pudieran tener acceso a funcionarios estadounidenses, según la acusación del Departamento de Justicia.
“Según se alega, Sue Mi Terry, ex empleada de la CIA y de la Casa Blanca, socavó las leyes de registro de agentes extranjeros para proporcionar acceso, información y defensa a los oficiales de inteligencia de Corea del Sur”, dijo en un comunicado el Fiscal de Estados Unidos Damian Williams. “Terry presuntamente vendió sus posiciones e influencia al gobierno surcoreano a cambio de bolsos de lujo, comidas caras y miles de dólares de financiamiento para su programa de política pública”.
“Los cargos presentados deberían enviar un mensaje claro a aquellos en política pública que puedan ser tentados a vender su experiencia a un gobierno extranjero: piénsenlo dos veces y asegúrense de estar en conformidad con la ley”, continuó.
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Sue Mi Terry, ex empleada de la CIA y alta funcionaria del Consejo de Seguridad Nacional, fue acusada de actuar como agente secreta para el servicio de inteligencia de Corea del Sur a cambio de regalos de lujo. (Getty Images)
Terry también confesó al FBI que actuó como fuente de información para la inteligencia surcoreana, lo que incluyó pasar notas escritas de una reunión no oficial en junio de 2022 con el Secretario de Estado Antony Blinken sobre la política del gobierno de Estados Unidos hacia Corea del Norte, en la que estuvo presente, según la acusación.
“Comprometer la seguridad nacional pone en peligro a todos los estadounidenses al debilitar nuestras defensas y poner vidas en riesgo”, dijo Christie M. Curtis, Directora Adjunta Interina del FBI, en un comunicado. “Sue Mi Terry, ex funcionaria de la CIA y de la Casa Blanca, fue arrestada por presuntamente actuar como agente no registrado para Corea del Sur. Durante más de una década, a pesar de advertencias repetidas, Terry supuestamente aprovechó sus roles en grupos de reflexión para avanzar una agenda extranjera.”
“Como se alega, reveló información sensible del gobierno de Estados Unidos a la inteligencia surcoreana y utilizó su posición para influir en la política estadounidense a favor de Corea del Sur … por dinero y regalos de lujo”, continuó Curtis. “Sus presuntas acciones representaron una grave amenaza para la seguridad nacional. Este arresto envía un mensaje claro: el FBI perseguirá y arrestará a cualquier persona que ponga en peligro la seguridad de nuestra nación colaborando con espías extranjeros.”
El Servicio Nacional de Inteligencia de Corea del Sur dijo el miércoles que las autoridades de inteligencia en el país están en estrecha comunicación con Estados Unidos en relación con este caso.
Los cargos contra Terry, que trabajó para el gobierno de Estados Unidos desde 2001 hasta 2011, se derivan de su conducta después de dejar el gobierno y trabajar para grupos de reflexión como experta en política pública sobre asuntos extranjeros.
Terry trabajó primero como analista de la CIA en temas de Asia Oriental antes de servir como directora para Corea, Japón y Asuntos Oceánicos en el Consejo de Seguridad Nacional y luego como subdirectora de Asuntos de Inteligencia Nacional para Asia Oriental en el Consejo de Inteligencia Nacional. Después de dejar el gobierno, comenzó a trabajar para grupos de reflexión en Nueva York y Washington, D.C., incluido el Consejo de Relaciones Exteriores.
Los fiscales acusan a Terry de no registrarse con el Departamento de Justicia como agente extranjero.
Sue Mi Terry confesó al FBI que actuó como fuente de información para la inteligencia surcoreana. (Getty Images)
Terry dijo en los formularios de divulgación presentados a la Cámara de Representantes, donde testificó al menos tres veces entre 2016 y 2022, que no estaba “registrada activamente”.
Tampoco reveló su trabajo encubierto con Corea del Sur, dice la acusación, lo que impidió que el Congreso tuviera “la oportunidad de evaluar justamente el testimonio de Terry a la luz de sus esfuerzos de larga data” para el gobierno.
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El abogado de Terry, Lee Wolosky, dijo en un comunicado que las acusaciones son “infundadas” y “distorsionan el trabajo de una académica y analista de noticias conocida por su independencia y años de servicio a Estados Unidos”.
Wolosky dijo que su cliente no ha tenido autorización de seguridad desde hace más de una década y que sus puntos de vista han permanecido consistentes.
“De hecho, fue una crítica feroz del gobierno surcoreano durante los momentos en que esta acusación alega que actuaba en su nombre”, dijo. “Una vez que los hechos queden claros, será evidente que el gobierno cometió un error significativo”.
La agencia Associated Press contribuyó a este informe.
Fuente y créditos: www.foxnews.com
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