Lesiones sexuales: lo que necesitas saber
El sexo debería ser una experiencia divertida y placentera que te deje en un estado de felicidad post-coital, y no una que te envíe a la sala de emergencias. Sin embargo, las lesiones ocurren de vez en cuando. Las lesiones menores a menudo se pueden manejar en casa, pero las más serias pueden requerir una visita a la sala de emergencias. “Como médico de emergencias, he visto una amplia gama de lesiones, pero algunas de las más sorprendentes y delicadas involucran accidentes relacionados con el sexo”, dijo el Dr. Jordan Wagner, conocido como Doctor ER en YouTube. “Estas lesiones pueden ser tanto embarazosas como dolorosas, pero son más comunes de lo que piensas”. A continuación, los médicos de emergencias comparten cómo ocurren estas lesiones, cómo se tratan y ofrecen algunas advertencias para que puedas evitarlas en tu propia habitación.
Fractura de pene
Las fracturas del pene, aunque poco comunes, pueden ocurrir durante la actividad sexual debido a un trauma directo a un pene erecto. El pene no contiene huesos, por lo que la “fractura” es en realidad el desgarro de la túnica albugínea, la capa externa de los cuerpos cavernosos que se llenan de sangre para crear una erección. El Dr. Joe Whittington, quien maneja la cuenta de TikTok Dr. Joe MD, recuerda un caso de un hombre de poco más de 20 años que ingresó a la sala de emergencias con una fractura de pene sospechada. “Era su primer encuentro sexual, y relató que durante la intensa actividad, su pene se salió y se dobló con fuerza contra el hueso pélvico de su pareja”, dijo a HuffPost. “Inmediatamente oyó un sonido de estallido, seguido de un dolor agudo, hinchazón y moretones. Confirmamos rápidamente el diagnóstico y lo programamos para una cirugía de emergencia para reparar la túnica albugínea rota”.
Después de la cirugía, se le aconsejó a este hombre que se abstuviera de la actividad sexual y se le administró medicación para el dolor, dijo Whittington. “Este incidente subraya la importancia de mantener una buena comunicación y evitar movimientos demasiado agresivos durante el coito para prevenir lesiones tan dolorosas”. La uretra, el tubo que permite que la orina salga del cuerpo, también puede resultar dañada durante una fractura de pene. Según la exmédica de emergencias Jessica Singh, fundadora y CEO de Sukhayu Wellness, “es fundamental buscar una evaluación y tratamiento médico de emergencia” si experimentas los síntomas mencionados anteriormente.
Objeto atascado en el recto
Entre 2012 y 2021, se estimaron 39,000 visitas a servicios de urgencias en EE. UU. por cuerpos extraños rectales, es decir, objetos atascados en el recto. “Aunque pueden haber varias razones para la inserción de cuerpos extraños, se insertan más comúnmente durante la actividad sexual”, dijo Singh. Wagner ha visto de todo, desde frutas hasta bombillas y botellas de agua, quedar atascadas en el recto de un paciente después de ser insertadas por placer sexual. “El cuerpo crea presión negativa, así que una vez que se inserta demasiado, puede ser succionado”, explicó. “Si tuviera un centavo por cada vez que un paciente me dijo que ‘se cayó sobre algo’, ya estaría retirado en una isla privada”, añadió.
En ocasiones, los médicos pueden extraer estos objetos manualmente con una mano enguantada o un espéculo, pero situaciones más complicadas requieren cirugía. Whittington recordó un caso en el que un hombre de mediana edad llegó a la sala de emergencias con un dolor abdominal severo e incapacidad para defecar. “Él admitió tímidamente haber insertado una bombilla en su recto durante un juego anal, que ahora se había quedado atascada. Dada la naturaleza delicada y potencialmente peligrosa de la situación, tomamos precauciones extras para asegurar que la bombilla se extrajera de forma segura sin romperse”, explicó. “Después de las evaluaciones iniciales, retiramos cuidadosamente el objeto bajo sedación para evitar complicaciones adicionales como perforación o infección. Después del procedimiento, fue monitoreado en busca de signos de infección y se le administraron antibióticos como precaución”.
Erección prolongada
El priapismo es el término médico para una “erección no deseada, prolongada y dolorosa que dura horas más allá de la estimulación sexual o ocurre sin ninguna estimulación sexual”, explicó Wagner. Cuando una erección dura más de cuatro horas, se convierte en una emergencia médica, dijo. “La sangre puede comenzar a solidificarse, causando daño permanente y la incapacidad de tener futuras erecciones. En el negocio, decimos: ‘el tiempo es pene’”, afirmó Wagner. En los casos de priapismo relacionados con el sexo, los principales culpables son los medicamentos utilizados para la disfunción eréctil, como Viagra, o terapias de inyección peniana. Se considera que las erecciones prolongadas son un efecto secundario raro de los medicamentos orales para la disfunción eréctil como Viagra.
Sin embargo, cuando se combinan las inyecciones penianas y los medicamentos orales, el riesgo de priapismo se eleva, advirtió el urólogo Dr. Drogo Montague, del Cleveland Clinic. “Así que mantente en el lado seguro y no los combines”, aconsejó Montague. Cuando ocurre priapismo, el objetivo es reducir la erección. “Esto puede involucrar inyecciones de medicamentos en el pene para ayudar al flujo sanguíneo”, dijo Wagner. “Si eso no funciona, utilizamos agujas de gran calibre para aspirar, o remover, la sangre del pene. Si comienza el proceso de solidificación de la sangre, un urólogo podría necesitar realizar una cirugía para insertar un bypass peniano o, en casos severos, un implante de pene”.
Pene captivus
El pene captivus ocurre cuando el pene se queda atascado dentro de la vagina durante la relación sexual. Esencialmente, los músculos vaginales se contraen más de lo habitual, apretando la abertura vaginal y dificultando la extracción de un pene congestionado. Una vez que las contracciones musculares o la erección disminuyen, las parejas deberían poder separarse. Se cree que es un evento muy raro en humanos y la mayor parte de la información que tenemos al respecto es de naturaleza anecdótica. El pene captivus podría estar relacionado con una condición llamada vaginismo en la que “la vagina se cierra involuntariamente debido a espasmos musculares en el piso pélvico”, según Medical News Today. Whittington dijo que encontró a una joven pareja que llegó a la sala de emergencias “en un estado de considerable vergüenza” después de que los músculos vaginales de la mujer se habían contraído tan firmemente durante el sexo que los dos estaban “pegados”. “La pareja explicó que la situación surgió durante un momento particularmente apasionado”, dijo. “Para ayudarlos, usamos relajantes musculares y compresas frías para relajar suavemente los músculos vaginales. Después de un corto tiempo, pudieron separarse sin más problemas”.
Infecciones genitales causadas por heces
Las infecciones peniles o vaginales pueden ocurrir si cortes en los genitales están expuestos a materia fecal u otros contaminantes, dijo Wagner. “Esto puede suceder durante el coito si no se mantiene una higiene adecuada o si se transita de sexo anal a vaginal sin limpiar”, explicó. “Estas infecciones son generalmente el resultado de bacterias que ingresan al cuerpo a través de lesiones menores, siendo la E. coli la más común”.
Típicamente, estas infecciones se tratan con antibióticos y cuidado adecuado de las heridas, aunque algunos pacientes pueden necesitar ser hospitalizados y recibir antibióticos intravenosos. “La buena higiene es crucial”, dijo Wagner. Para prevenir infecciones, debes cambiar los condones si estás transitando entre el sexo anal y el sexo vaginal. Y cualquier pene, dedo o juguete sexual que haya estado en el ano debe lavarse a fondo con agua y jabón suave antes de entrar en la vagina.
Fuente y créditos: www.huffpost.com
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