Aumento de amenazas a periodistas en América Latina
Washington — La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y otras organizaciones que velan por la libertad de prensa denuncian un aumento en las amenazas y la inseguridad para los comunicadores en Latinoamérica. Esto incluye el uso excesivo del sistema judicial contra periodistas, intimidaciones directas y acciones del crimen organizado para evitar investigaciones sobre sus operaciones.
El caso de José Rubén Zamora en Guatemala
El caso del periodista José Rubén Zamora es un ejemplo claro de acoso y judicialización, según el análisis de la SIP “Bajo amenaza: periodistas en América Latina exigen seguridad”. Su encarcelamiento preocupa, ya que la Cámara Penal de la Corte Suprema de Justicia de Guatemala postergó hasta el 24 de septiembre de 2025 la decisión sobre su apelación que anuló su condena de seis años de prisión por supuesto lavado de dinero y le concedió la libertad condicional. Zamora fue detenido en julio de 2022 después de que su medio, El Periódico, destapara casos de corrupción durante la gestión del expresidente Alejandro Giammattei.
Situación en México
En México, considerado uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, se han registrado tres asesinatos a periodistas en lo que va de 2024. Recientes amenazas de muerte contra la periodista Silvia Peraza Azueta, quien fue blanco de atentados, han alarmado a las organizaciones. Peraza, fundadora del medio Código Rojo, denunció amenazas tras investigar la atención en la Seguridad Social. Las autoridades han capturado a dos sospechosos del ataque.
Amenazas en Colombia y Perú
El periodista colombiano William Stiven Rojas enfrenta amenazas de muerte desde hace más de un año, incluyendo intimidaciones de grupos criminales. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha exigido al gobierno colombiano garantizar su seguridad. En Perú, Paola Ugaz se convirtió en la primera comunicadora a la que se le viola el derecho al “secreto de sus comunicaciones”, tras un tribunal solicitar registros de llamadas desde 2013 hasta 2020 mientras investigaba a un grupo religioso relacionado con un escándalo de abusos sexuales.
La SIP y otras instancias están monitoreando de cerca la situación de periodistas en otros países de la región como Bolivia, Costa Rica, El Salvador, Honduras, Ecuador y Argentina.
Fuente y créditos: www.vozdeamerica.com
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