Visita del Jefe de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana a Berlín
El jefe de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana (UGCC), Sviatoslav Shevchuk, visitó Berlín esta semana. Participó en la Recepción de San Miguel, a invitación del episcopado alemán. La situación en Ucrania dominó el evento de este año. El jefe de la UGCC se reunió con miembros de la diáspora ucraniana en Berlín, obispos locales y oficiales alemanes, incluido el canciller Olaf Scholz.
Diálogo Interreligioso en Tiempos de Guerra
En una entrevista, Shevchuk compartió que el primer tema de conversación fue la guerra en Ucrania, y notó el profundo impacto que esta tiene en las personas presentes. “Muchos se sienten incómodos por estar aquí. La gente anhela su patria”, dijo, resaltando que solo en Berlín hay 95,000 ucranianos. Shevchuk enfatizó la necesidad de consolidación en la comunidad y cómo la iglesia sirve como plataforma para la unidad.
Relaciones Institucionales y la Ley de la Iglesia
En agosto, el parlamento ucraniano adoptó una ley que regula las actividades de organizaciones religiosas vinculadas a la Iglesia Ortodoxa Rusa, dando a las iglesias ucranianas un plazo de nueve meses para cortar sus lazos con Moscú. Shevchuk reconoció el derecho del estado a cuidar la seguridad nacional en cuestiones de religión. También mencionó que la ley no es prohibitiva, sino protectora, dado que existe un riesgo de manipulación de las instituciones religiosas por parte del estado agresor.
La Posición del Papa Francisco
Shevchuk también abordó las declaraciones del Papa Francisco, que han causado preocupación en Ucrania. Aclaró que, aunque el Vaticano ha adoptado una posición neutral en términos diplomáticos, siente apoyo moral hacia Ucrania. “El papa ha condenado la guerra en Ucrania y claramente dijo que está del lado de Ucrania”, afirmó. Su mensaje ha sido claro y sus gestos han demostrado apoyo hacia el país.
La Situación de la Iglesia en Territorios Ocupados
En los territorios ocupados de Ucrania, la Iglesia Greco-Católica Ucraniana ha sido prohibida por los rusos. Shevchuk informó sobre la brutalidad que enfrentan los sacerdotes ucranianos, quienes han sido arrestados y torturados. Actualmente, no hay sacerdotes en las zonas ocupadas, pero la comunidad sigue viva, y se rece en idioma ucraniano incluso bajo condiciones difíciles.
La iglesia vive porque la gente cree en Dios y mantiene la iglesia en sus corazones.
Fuente y créditos: www.dw.com
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