La Unión Europea aprueba aranceles a vehículos eléctricos chinos
La Unión Europea votó el viernes para allanar el camino para aranceles de hasta el 35.3% sobre vehículos eléctricos importados de China, un movimiento que podría preparar el terreno para una prolongada guerra comercial con el gigante asiático.
La votación se produjo tras un año de investigación sobre subsidios por parte de la Comisión Europea, que propuso los aranceles para contrarrestar lo que considera subsidios chinos injustos. Países como Francia, Italia, Grecia y Polonia indicaron que apoyarían los aranceles, mientras que Alemania se opuso.
La Comisión Europea, el órgano ejecutivo del bloque, decidirá ahora si los derechos de importación entran en vigor a principios de noviembre. La Comisión ha señalado que los aranceles podrían ser levantados si China atiende las preocupaciones de la UE.
Rechazo de Alemania y España a los aranceles
Alemania, la mayor economía del bloque y un importante productor de automóviles, ha expresado fuertes objeciones, temiendo que los aranceles puedan dañar a sus fabricantes de automóviles, que dependen en gran medida del mercado chino. El fabricante alemán Volkswagen criticó los aranceles, calificándolos de “enfoque incorrecto”.
Los aranceles varían del 7.8% para empresas extranjeras como Tesla, que fabrican vehículos en China, hasta un 35.3% para empresas chinas que supuestamente no cooperaron durante la investigación. Estos aranceles se suman al arancel estándar del 10% de la UE sobre automóviles.
Mientras tanto, según un informe exclusivo de Reuters, el Ministro de Economía español, Carlos Cuerpo, escribió al Vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, pidiendo que se mantuvieran abiertas las negociaciones más allá de la votación, en lugar de imponer aranceles. Eslovaquia y Hungría también se oponen a los aranceles propuestos.
Defensa de los aranceles por parte de la Comisión Europea
La Comisión Europea, que supervisa la política comercial del bloque, argumenta que los aranceles son necesarios para proteger a los fabricantes europeos de automóviles de la competencia desleal, ya que los fabricantes chinos se benefician de subsidios estatales sustanciales.
Beijing se opone a los aranceles, calificándolos de “proteccionistas” y amenazando con medidas de represalia. Estados Unidos y Canadá han anunciado aranceles del 100% sobre vehículos eléctricos chinos, dejando a la UE como un mercado lucrativo para los EVs chinos.
China ya ha lanzado investigaciones sobre las importaciones europeas de brandy, productos lácteos y cárnicos, lo que señala medidas reactivas. La Comisión Europea ha indicado su disposición a continuar negociaciones con China, incluyendo la consideración de un precio mínimo de importación para vehículos eléctricos.
Fuente y créditos: www.dw.com
Cats: Business