La Limpieza del Turno de Cierre
Como muchas personas, tuve un trabajo en el comercio minorista durante la universidad. Lo que no me dio en recompensas financieras, lo compensó al enseñarme habilidades para la vida. Aprendí a mantener la calma cuando alguien gritaba y estaba equivocado, cómo negociar y cómo gestionar mi tiempo. Otras habilidades aprendidas no eran tan obvias. Por ejemplo, no me di cuenta de que siempre que trabajaba un turno de cierre, estaba aprendiendo a gestionar mi propio hogar. Al menos, eso es lo que los influencers de CleanTok me harían creer con esta nueva tendencia de limpieza. Se llama “limpieza del turno de cierre” y es posible que la hayas visto en TikTok o Reels.
¿Qué es la Limpieza del Turno de Cierre?
La limpieza del turno de cierre es exactamente lo que parece, siempre que sepas de qué se trata un turno de cierre: organizas por la noche y preparas todo para los que abren. En este caso, no solo eres el que cierra, sino también el que abre. Si alguna vez tuviste que trabajar un turno “clopen”, recordarás que ponías más esfuerzo en cerrar para facilitar la apertura por la mañana. Esto es similar, pero para tu hogar. Si alguna vez cerraste un café, sabes que debes asegurarte de que la comida esté lista para la mañana siguiente. Si alguna vez cerraste una tienda en un centro comercial, sabes que tienes que asegurarte de que los exhibidores estén en orden. Debes contar el dinero en la caja, sacar la basura y apagar todas las máquinas. La idea es tener todo eso hecho para que el que abre pueda concentrarse en las tareas de apertura, como meter los muffins en el horno o coordinar una entrega con el agente de reposición. Cuando haces un “turno de cierre” en casa, piensas en lo que necesitarás a la mañana siguiente y lo preparas.
¿Por qué Funciona la Limpieza del Turno de Cierre?
Pensar en tu hogar como un negocio no es un concepto nuevo en el ámbito de la organización. En el pasado, he recomendado una técnica que implica almacenar productos extras en un área de “almacenaje”, como harías en una tienda. Tratar tu hogar como un negocio te permite ser más metódico y objetivo, y elimina gran parte de la indecisión. Como es cierto en cualquier negocio, quieres comenzar tu día sin tropiezos; quieres que todo salga según lo planeado. Prepararte la noche anterior organizando tu cocina, reuniendo todo lo que necesitarás por la mañana y “cerrando” la casa, te da una ventaja para el día. No solo mejora el día siguiente antes de que comience, sino que te proporciona una sensación de logro al irte a la cama. Para que esto funcione, pasa unos días tomando nota de lo que te retrasa por la mañana, ya sea buscar tus botas de lluvia en el fondo del armario o tropezar con la ropa doblada que aún no has guardado. ¿Qué, si se elimina o se resuelve, haría que tu mañana fuera mejor? Toma nota también de lo que te pesa al dormirte, como los platos que dejaste en el fregadero o la basura que no sacaste. Luego, comprométete a abordar estas preocupaciones por la noche, construyendo una lista de verificación personal de responsabilidades de “cierre”.
Fuente y créditos: lifehacker.com
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