El Monumento de la Unidad en Berlín
El Monumento de la Unidad en Berlín está planeado para ser una estructura caminable. La idea es que las personas podrán pisarlo, y el monumento se inclinará de un lado a otro si suficientes personas se reúnen en una dirección —por eso el proyecto se ha conocido popularmente como el “Einheitswippe”, o “balancín de la unidad”.
Un símbolo conmemorativo
El monumento fue concebido como un símbolo conmemorativo de las protestas pacíficas llevadas a cabo por los ciudadanos de la Alemania Oriental que condujeron a la caída del Muro de Berlín y, más tarde, a la reunificación alemana en 1990.
El Bundestag alemán votó para erigir dicho monumento en 2007.
Sin embargo, más de tres décadas después de la reunificación de Alemania, la construcción de la estructura caminable del monumento “Ciudadanos en Movimiento” sigue sin terminar, con una disputa ahora poniendo en peligro su finalización.
Disputas entre partes involucradas
Los involucrados son dos ministerios federales alemanes, una agencia de Stuttgart y una empresa de construcción de acero con sede en Renania del Norte-Westfalia. Se trata de dinero, sensibilidades personales y un tira y afloja legal.
“El ministro de Estado para la Cultura, Claudia Roth, y su oficina están trabajando […] a toda velocidad para implementar las resoluciones del Bundestag sobre la erección del Monumento a la Libertad y la Unidad y encontrar soluciones viables”, dijo un portavoz de la política verde a DW. La declaración da una idea de cuán enredada se ha vuelto la situación.
Retrasos y problemas financieros
El Monumento de la Unidad debía haber sido inaugurado en 2019. Sin embargo, esto nunca se materializó: debates políticos, obstáculos burocráticos, preocupaciones de seguridad y una falta de fondos retrasaron el inicio de la construcción y, posteriormente, también su finalización.
Mientras tanto, el pedestal histórico, los cimientos y la rampa necesaria han sido completados en el Humboldt Forum, en el corazón de Berlín. La estructura de acero podría instalarse ahora, pero no se ha hecho, habiendo aterrizado en el centro de la última disputa que está bloqueando el proyecto.
La empresa de construcción de metal Rohlfing GmbH, en Renania del Norte-Westfalia, comenzó a construir la estructura en 2020. Pero tres años después, Rohlfing y la agencia de Stuttgart Milla & Partner, que era responsable del proyecto de 18 millones de euros, tuvieron un desacuerdo. En diciembre de 2023, Rohlfing recibió un aviso de terminación, según informó el medio alemán Westdeutscher Rundfunk. El monumento estaba al 85% de su finalización en ese momento. Desde entonces, los 32 componentes han sido almacenados en el hall de producción de la empresa.
Conflictos legales y futuro incierto
Milla & Partner quiere que Rohlfing entregue la estructura para que otra empresa pueda completar el monumento, y ha acudido a los tribunales para lograrlo.
“No quieren entregarla, la tienen de rehén”, dijo el director de la agencia, Johannes Milla, a DW. “Mientras tanto, el Tribunal Superior de Hamm ha fallado a nuestro favor: sí, la estructura debe ser devuelta.”
Pero hay un inconveniente. El tribunal ha condicionado su orden temporal a que se deposite una garantía de 100,000 euros. Sin embargo, según Milla, este depósito no es su responsabilidad.
“La estructura ha pertenecido desde hace tiempo al gobierno federal, porque demandamos en nombre del gobierno federal”, explicó, añadiendo que la Oficina Federal de Construcción y Planificación Regional (BBR) se ha negado a pagar este depósito, ya que afirman que es un problema de la agencia.
La agencia de Stuttgart, su socio contractual en Berlín, la BBR, y el Comisionado del Gobierno Federal para la Cultura y los Medios (BKM), que supervisa el proyecto, están en desacuerdo.
“Los retrasos, los aumentos en los costos de construcción y nuestros costos fijos están haciendo que el monumento sea cada vez más caro”, dijo Milla. “No tenemos el dinero. Así que informamos a la BBR que necesitamos entre 3 y 4 millones de euros adicionales para continuar con el proyecto.”
Esta negociación con la BBR y la BKM ha durado seis meses. “El problema se está pasando de un lado a otro entre la BKM y la BBR como si fuera una papa caliente”, dijo Milla.
Una portavoz del ministro de Estado para la Cultura Roth informó a DW: “A pesar de los nuevos pagos de la BBR como parte de un plan de pagos ajustado a favor del consorcio en febrero de 2024, el contratista principal no ha logrado resolver su conflicto con el constructor de acero que contrató, lo que ha llevado a la situación actual.”
El gobierno federal ha encargado una auditoría externa para aclarar el uso de fondos hasta la fecha y los costos esperados para la finalización del monumento.
Entretanto, la empresa de construcción de metal Rohlfing ahora está en quiebra. “El administrador concursal está manteniendo conversaciones con la ARGE y la Oficina Federal de Construcción y Planificación Regional sobre si el monumento debe ser completado por la empresa y, de ser así, bajo qué condiciones”, dijo un portavoz del administrador concursal Frank Schorisch a DW. “No se ha tomado una decisión aún, y por lo tanto, la devolución de las partes del monumento que han sido fabricadas hasta la fecha no es un tema actual.”
Mientras tanto, la agencia Milla & Partner también ha presentado una solicitud de quiebra. El trabajo continúa con normalidad y, según Johannes Milla, los inversores están esperando para hacerse cargo de la agencia.
“Queremos continuar con el monumento; la pelota ahora está en el tejado de Claudia Roth”, dijo Milla. El gobierno federal está tratando de encontrar una solución, según informes de Berlín, y aparentemente ha solicitado dinero adicional al Comité de Presupuesto del Bundestag.
Según Milla, es concebible que la estructura casi terminada termine teniendo que ser desechada y que los cimientos sean demolidos. “Estas imágenes televisadas darán la vuelta al mundo”, advirtió. “Mostrarán cómo Alemania está demoliendo el monumento a la libertad y la unidad 35 años después de la reunificación.”
Fuente y créditos: www.dw.com
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