La oposición venezolana asegura que continúa su trabajo político “con mucha dificultad” después de la juramentación de Nicolás Maduro para un nuevo período de gobierno hace 3 semanas, a pesar de que decenas de sus dirigentes y activistas partidistas están arrestados o en la clandestinidad.
“Seguimos dando la pelea”, dijo a la Voz de América Juan Pablo Guanipa, exprimer vicepresidente del Parlamento electo en 2015, dirigente del partido opositor Primero Justicia y colaborador de la líder opositora María Corina Machado. Guanipa, de 60 años y oriundo del estado Zulia, se encuentra “en resguardo” en una locación desconocida dentro de Venezuela por el riesgo de ser detenido por las fuerzas de seguridad del gobierno de Maduro.
De acuerdo con una investigación de la prensa local, más de 240 políticos y activistas de partidos de la oposición han sido arrestados o desaparecidos forzadamente por cuerpos militares y policiales en los últimos 6 meses. Entre ellos, se encuentran varios exdiputados y líderes políticos como Williams Dávila, Américo De Grazia, Enrique Márquez y Freddy Superlano.
“La represión por parte de esta dictadura ha sido implacable”, apuntó Guanipa, quien atribuye las detenciones de sus aliados políticos a su trabajo por “defender la democracia y la libertad de Venezuela”. El gobierno, por su parte, acusa a los opositores de intentar desestabilizar al país y fomentar el “terrorismo”, algo que los opositores niegan.
La última vez que se vio a Guanipa en público fue el 9 de este mes, durante una protesta en Caracas en vísperas de la nueva investidura de Maduro, donde también reapareció Machado. Buena parte del liderazgo opositor ha migrado al extranjero o está “en resguardo” dentro del país por amenazas, admitió Guanipa, quien insistió en que, a pesar de las dificultades, siguen luchando para generar presión interna e internacional por el cambio político en Venezuela.
### El reto de una nueva elección
La Plataforma Unitaria, un bloque de partidos opositores al chavismo, afirma haber ganado la elección presidencial de julio pasado con una ventaja superior a los 36 puntos, pero denuncia irregularidades en la totalización de resultados. Esta semana, el Consejo Nacional Electoral convocó a una nueva votación el 27 de abril para renovar el poder legislativo nacional, los gobernadores regionales y los órganos legislativos de los 23 estados del país.
Esa inminente elección presenta un nuevo desafío para la oposición: decidir si votar a pesar de la controversia de las elecciones presidenciales de julio o abstenerse. “Desde mi perspectiva, no hay elecciones justas en Venezuela hasta que se reconozca la soberanía popular que decidió sacar a Maduro del poder”, expresó Guanipa.
El diplomático Edmundo González, candidato de la oposición, ha prometido volver al país para asumir la presidencia y está de gira por varios países, en reuniones con mandatarios aliados a la causa opositora. Guanipa reafirmó su esperanza de que el país se reencuentre con la democracia y la libertad, resaltando la importancia de respetar la voluntad popular.
### ¿Cómo sigue el trabajo político opositor?
Otros dirigentes mencionaron que parte de su trabajo reciente es “manejar la inteligencia emocional” en sus reuniones y declaraciones públicas. “Lamentablemente, toda palabra o acción puede comprometer a quienes hacen política”, advirtió una líder de uno de los principales partidos políticos.
Los activistas en la clandestinidad “usan la tecnología” para seguir trabajando por la redemocratización del país y garantizar la unidad de las fuerzas opositoras. La dirigencia del partido organiza encuentros “sin arriesgar su libertad”. Según algunos, “la política no es solo electoral”, sino también atención social y ayuda al necesitado.
María Corina Machado, considerada la gran movilizadora del voto opositor en las presidenciales y actualmente en la clandestinidad, llamó a boicotear las elecciones de este año hasta que se respete la voluntad popular de julio de 2024. Sin embargo, una dirigente de un partido aliado expresó que la abstención no es una opción, ya que significa permitir abusos. “Ya demostramos que somos mayoría y que podemos ganar”, concluyó.
Fuente y créditos: www.vozdeamerica.com
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