Hace calor y hay mucha humedad dentro del abarrotado ferry que se acerca a la costa de Naxos. Cuando el ferry atraca, los turistas, cargados de equipaje, se apresuran a desembarcar. Toma alrededor de media hora para que todos abandonen el ferry.
El puerto está extremadamente ocupado: los coches tocan la bocina, las motocicletas se entrelazan entre los vehículos, un taxista gesticula de forma animada mientras habla en voz alta por su teléfono. A la izquierda hay un gran autobús esperando para llevar a los turistas a su alojamiento.
Los turistas aquí esperan con ansias sus vacaciones. Lo que muchos de ellos no saben es que las islas griegas se están quedando sin agua. El problema es particularmente agudo ahora en los meses de verano, cuando miles de veraneantes acuden a las Islas Egeas, uno de los destinos turísticos más populares de Europa.
La crisis del agua en Naxos
Este flujo de visitantes ejerce una enorme presión sobre la infraestructura hídrica de las islas, algunas de las cuales son viejas o incluso inexistentes. Este es definitivamente el caso de Naxos, la isla más grande de las Cícladas, que es popular entre los veraneantes de abril a octubre.
“Elegimos Naxos por las hermosas playas para los niños y el alojamiento económico”, dice la turista alemana Anja Kellermann, que está aquí con su esposo y dos hijos.
Cuando se le pregunta si es consciente de la escasez de agua en la isla, se muestra consternada. “No teníamos idea de que la situación es tan seria”, le dice a DW.
Severas condiciones climáticas
La región mediterránea en su conjunto sufre cada vez más sequías y los efectos del cambio climático. La situación en Grecia, y sobre todo en la mayor parte de las islas del Egeo, es particularmente mala.
Este año, Grecia ha sido azotada por grandes incendios forestales, mortales olas de calor y escasez de agua. En la actualidad, los reservorios de agua en Naxos están prácticamente agotados. Muchos pozos en Naxos, como este a solo unos kilómetros del puerto, se han secado.
En agosto, el agua es un lujo aquí. Los depósitos están casi vacíos y muchos pozos se han secado. El calor y la sequía de este año han sido particularmente extremos. No ha habido lluvias en Naxos durante casi nueve meses.
El impacto en los agricultores
El impacto de la disminución de las reservas de agua en los lugareños es especialmente duro porque, gracias a su suelo muy fértil, Naxos es la única isla de las Cícladas con un sector agrícola significativo.
La mayoría de los residentes de la isla trabaja en agricultura, por lo que el turismo se ha vuelto aún más importante este año como fuente de ingresos.
Kyriakos Kalogeitonas ha estado dirigiendo un hotel y un camping en Maragas, en el suroeste de la isla, desde 1987. “Este año en particular, debido a que la producción agrícola ha disminuido tan drásticamente, estoy viendo a muchos agricultores cambiarse al sector turístico”, le dice a DW, añadiendo que nunca ha experimentado una sequía como esta.
Kalogeitonas ya está considerando comprar una unidad de desalinización de agua salada porque no cree que la situación mejore a largo plazo: “No creo que las cosas vayan a mejorar para nosotros. Incluso si hay más lluvias un año, eso no soluciona el problema. Si no llueve el año siguiente, volvemos al principio”.
Desalinización del agua como solución de emergencia
Los turistas no se dan cuenta de lo malo que es, entre otras cosas, porque el sector turístico obtiene agua de plantas de desalinización, en particular las cercanas al puerto. Estas unidades están alojadas en contenedores blancos frente al puerto, que son fáciles de pasar por alto si no se sabe lo que son.
Actualmente hay cuatro plantas de desalinización en Naxos, que son capaces de producir 3,600 metros cúbicos de agua utilizable a partir de agua de mar en 24 horas. Las plantas fueron instaladas para satisfacer la creciente demanda de agua en la isla durante los meses de verano.
“Esta es una tecnología muy moderna, pero los costos asociados son altos”, dice el alcalde de Naxos, Dimitris Lianos, a DW.
Como las plantas de desalinización están cerca del puerto de Naxos, el agua solo puede usarse en la zona circundante. “Es un gran problema para nosotros que el agua no se pueda transportar de un lugar a otro porque no tenemos la infraestructura necesaria”, dice Lianos.
Los costos de transporte son demasiado altos.
A solo 4 kilómetros del puerto, las repercusiones son visibles. El agricultor Stelios Vathrakokoilis no podrá plantar una sola papa de Naxos este otoño. Vathrakokoilis se encuentra de pie en su campo yermo, mirando el suelo desnudo. Donde antes había plantas de papa de Naxos hasta donde alcanzaba la vista, ahora solo hay tierra seca.
Las papas han sido durante mucho tiempo uno de los principales productos agrícolas de las Cícladas, y las papas cultivadas aquí son populares en toda Grecia. Debido a la escasez de agua, el agricultor solo pudo plantar poco menos de ocho hectáreas este año. El año pasado fueron poco menos de 22 hectáreas, y en los años anteriores, hasta 80 hectáreas. El pozo en el campo de Vathrakokoilis tiene 14 metros de profundidad. Se ha secado desde principios de mayo.
“No queda ni una gota de agua. Hemos tenido años difíciles en el pasado, pero el daño de este año es simplemente irreparable”, le dice Vathrakokoilis a DW.
“La situación es dramática. Lo triste es que el futuro de la agricultura en la isla está en peligro”, dice, mirando su campo seco y vacío.
¿Desaparecerá la papa de Naxos?
Dimitris Kapounis, el presidente de la Unión de Cooperativas Agrícolas de Naxos, ya ha declarado una emergencia. “Solíamos producir un promedio de 6,000 toneladas. En 2023, fueron solo 4,000, y en la primavera de 2024, solo 1,800”, le dice a DW. “Nuestras existencias durarán hasta principios de octubre como mucho. Entonces no habrá más papas de Naxos”.
Mientras los lugareños están extremadamente preocupados y no saben cómo van a lidiar con la situación en el futuro, los turistas continúan disfrutando de sus vacaciones en la playa de Plaka, a solo 5 kilómetros al sur del puerto.
La residente de Atenas, Despina Krassa, es una visitante habitual de la isla. Sin embargo, a diferencia de la mayoría de los turistas extranjeros, está consciente del problema del agua en Naxos. En el pueblo interior de Filoti, donde le gusta pasar sus vacaciones, a menudo hay cortes de agua.
“Intento cuidar mi consumo de agua lo mejor que puedo”, dice. “Después de todo, el agua es preciosa”.
Fuente y créditos: www.dw.com
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