¿Deberías contratar a un entrenador personal?
La pregunta de si deberías contratar a un entrenador personal a menudo surge cuando una persona comienza en el gimnasio y se siente perdida, o cuando lleva un tiempo ejercitándose pero no ve progreso. La verdad es que no necesitas un entrenador personal, pero puedes beneficiarte de uno, dependiendo de tu personalidad, tus motivaciones y, especialmente, de tu presupuesto.
Lo que hacen bien los entrenadores personales
Un buen entrenador personal será excelente en el lado humano del entrenamiento. Si entras al gimnasio sin saber qué hacer, ellos serán la cara amigable que te enseñe y te motive a seguir asistiendo. Es importante destacar que no todos los entrenadores son grandes atletas o coaches, pero si los clientes regresan, es un indicativo de que saben hacer sentir a las personas bienvenidas y motivadas.
Un entrenador personal puede ser adecuado para ti si necesitas:
- Establecimiento de objetivos: Un entrenador puede ayudarte a definir tus metas y a planificar cómo alcanzarlas.
- Responsabilidad: Saber que alguien notará tu ausencia puede ser un buen incentivo para asistir.
- Estructura: El entrenador te ofrecerá tareas específicas para cada sesión.
- Consejos sobre hábitos saludables: Pueden discutir sobre nutrición y cómo incorporar hábitos saludables en tu vida.
- Familiaridad con el gimnasio: Si te da miedo entrar a la sala de pesas, ir con un entrenador puede facilitarte la tarea.
- Instrucción para principiantes: Si nunca has realizado un ejercicio, tu entrenador puede mostrártelo.
Limitaciones de los entrenadores personales
Aunque muchos ven a los entrenadores personales como expertos en todo lo relacionado con el fitness, la realidad es que su experiencia y conocimiento no siempre son tan amplios como se podría esperar. Algunos entrenadores son excelentes para guiar en levantamientos o en alcanzar metas específicas, pero otros pueden haber obtenido su certificación sin un conocimiento real sobre cómo mejorar la fuerza o la condición física a largo plazo.
A continuación se presentan algunas áreas donde muchos entrenadores pueden no ser tan competentes:
- Coaching detallado o avanzado de ejercicios: La mayoría de los entrenadores no pueden ofrecer la misma calidad de coaching que un entrenador especializado en pesas o kettlebells.
- Programación para el éxito a largo plazo: Muchos entrenadores solo se enfocan en mantenerte ocupado en cada sesión, sin planificar a largo plazo.
- Planes de comidas o coaching nutricional detallado: No son dietistas y no deben dictarte exactamente qué comer.
- Enseñarte a usar el gimnasio por tu cuenta: Si deseas aprender a entrenar independientemente, asegúrate de que tu entrenador te esté enseñando a hacerlo.
- Tratar o prevenir lesiones: Mientras que un cuerpo fuerte es resistente, no sustituye a la atención de un fisioterapeuta en caso de lesiones.
Cómo saber si un entrenador personal está calificado
La mayoría de los entrenadores personales, especialmente en gimnasios grandes, han obtenido certificaciones como ACE-CPT o NASM-CPT. Sin embargo, estas certificaciones no garantizan que el entrenador sea bueno en su trabajo, ya que se pueden obtener sin experiencias prácticas.
Si buscas un buen entrenador personal, las certificaciones solo indican lo que la persona ha aprendido. Es más importante saber qué han logrado con otros clientes. La mejor manera de encontrar un entrenador es preguntar a los clientes de tu gimnasio si han tenido buenos resultados y están satisfechos.
Costos de los entrenadores personales y opciones alternativas
El entrenamiento personal en persona, en sesiones privadas, no es barato; los costos pueden oscilar entre $50 y $200 por hora, además de las tarifas de membresía del gimnasio. Algunos gimnasios ofrecen formación personal como complemento, por lo que es importante que revises todos los detalles y te reúnas con el entrenador antes de comprometerte.
Si no puedes pagar el costo completo, considera opciones como sesiones semi-privadas o grupos pequeños, sesiones espaciadas o entrenamiento personal en línea, que puede incluir entrenamientos que puedas realizar de forma independiente.
¿Cuándo debes esquivar al entrenador y ejercitarte solo?
No recomiendo contratar un entrenador personal si eres lo suficientemente motivado, curioso y valiente, y estás dispuesto a asumir cualquier resultado, bueno o malo. El proceso de descubrir tu propio camino de fitness puede ser parte de la diversión. Sin embargo, si no has comenzado después de un tiempo o siempre tiendes a dejarlo, considera si necesitas un tipo de ayuda externa, ya sea un entrenador personal, un coach en línea, o un amigo que te acompañe a entrenar.
Fuente y créditos: lifehacker.com
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