La decisión radical de Ben Cohen-Vigder
Para Ben Cohen-Vigder, un adolescente de 14 años, perder accidentalmente su smartphone en el autobús escolar el pasado febrero resultó en una experiencia enriquecedora. “Estuve sin mi teléfono durante dos días y me di cuenta de que mis días eran mucho más largos y plenos”, comentó Ben. Tan positiva fue la experiencia que el portero de lacrosse de octavo grado decidió cambiar a un teléfono antiguo, lo que le permitió comunicarse sin las distracciones de las funciones inteligentes.
El impacto del tiempo de pantalla en los jóvenes
Un número creciente de expertos alerta sobre el aumento del tiempo de pantalla y su efecto en los niños y adolescentes. En un informe de 2023 sobre el uso de redes sociales y la salud mental, el ex Cirujano General de EE. UU., Dr. Vivek Murthy, recomendó la creación de “zonas libres de tecnología” y fomentar amistades en persona. Mientras tanto, varios estados han tomado medidas para prohibir los teléfonos celulares en las escuelas.
Ben solía tener un promedio de cinco horas de tiempo de pantalla al día. Después de cambiar a un teléfono antiguo, ese tiempo se redujo a aproximadamente 30 minutos. CBS News invitó a cuatro amigos de Ben, Carson, Ranita, Jamison y Maya, todos estudiantes de octavo grado en Nueva Jersey, a probar teléfonos antiguos durante una semana. Al inicio de la semana, Maya reportó más de 10 horas de tiempo de pantalla, principalmente viendo televisión y utilizando TikTok.
Reacciones y experiencias durante el experimento
Aunque estaban curiosos, los adolescentes tenían reservas sobre el experimento. Jamison señaló que no estaba rindiendo en la escuela como deseaba y pensaba que el uso de su teléfono podría ser una “gran razón”. A pesar de que Ranita participa en tres deportes, admitió que pasaba tiempo en su teléfono, convirtiendo 30 minutos de desplazamiento en una hora sin darse cuenta. Carson, un apasionado jugador de baloncesto, estaba nervioso, y Maya, quien ama estudiar inglés y recién empezó a remar, esperaba que la prueba le ayudara a mejorar su sueño nocturno.
Cuando CBS News se reunió con los adolescentes, tomaron sus iPhones y iPads y les dieron teléfonos antiguos. Las reacciones fueron una mezcla de risas, temblores y confusión. Pasaron tiempo reunidos alrededor de la mesa de la cocina mientras Ben les enseñaba a usar estos dispositivos desconocidos, incluyendo cómo enviar mensajes sin un teclado “moderno”. Salieron con instrucciones para intentar permanecer en el espíritu del experimento, evitando el uso del teléfono de amigos o padres como apoyo. Carson no resistió y pidió su teléfono de vuelta en menos de 24 horas, diciendo que se quedó mirando la pared hasta que tuvo práctica de baloncesto después de la escuela. Los demás perseveraron, enviando principalmente reseñas positivas en diarios de video grabados en los teléfonos de sus padres.
Reflexiones sobre el tiempo fuera de la pantalla
Al finalizar la semana, los adolescentes notaron una diferencia, al igual que sus padres. “Hablé mucho más con mis padres y salí más con mis amigos”, compartió Jamison. Su madre, Amy Lita, dijo que su hijo tenía cientos de mensajes de chats grupales al volver a su smartphone, “pero pensó que todo eran tonterías y no sintió que se perdiera de nada”.
Maya aprendió la importancia de vivir la vida fuera de la pantalla. Su madre, Lani Padilla, espera que la experiencia les ayude a cambiar su perspectiva en el futuro. “Espero que plantee una semilla para pensar un poco más críticamente sobre cómo usa ella su smartphone —y yo también”, dijo Padilla. El próximo mes marcará un año completo para Ben con su teléfono antiguo. Aunque sus amigos pueden no unirse a él de manera permanente, él cree que nunca es tarde para realizar un cambio —y que no tiene por qué ser todo o nada.
“No tiene que ser algo tan drástico como deshacerse completamente de todas tus redes sociales. Tengo una cuenta de Instagram que usaré en mi computadora, pero se trata más de hacer pequeñas cosas que puedes juntar para solucionar esa necesidad constante”, explicó Ben. Su madre, Jenn Cohen-Vigder, espera que más padres se den cuenta de esto. “Creo que si la gente realmente escucha lo que los niños dijeron y analiza bien, podría hacer que las personas reevaluaran cómo sus hijos usan sus teléfonos. Esto es algo de lo que la gente debería preocuparse”, agregó.
Fuente y créditos: www.cbsnews.com
Cats: CBS Evening News