Conferencia de prensa para solicitar justicia
En medio del peso emocional de una lucha de 35 años, Anamaria Baralt se unió a casi dos docenas de miembros de la familia Menendez, cuyas voces estaban unificadas en un llamado de justicia para los hermanos Erik y Lyle. “Aquí estamos, ambos lados de la familia – unidos. Compartiendo un nuevo vínculo de esperanza”, dijo Baralt, sobrina de José Menendez. “La esperanza de que con la reexaminación de su caso, se alcance un nuevo resultado. La esperanza de que esta pesadilla de 35 años termine y podamos volver a unirnos como familia. Estoy aquí para pedir a la oficina del fiscal que tenga en cuenta el panorama completo, la verdad que estuvo oculta durante tanto tiempo.”
Iniciativa sobre el abuso infantil
Los miembros de la familia Menendez se reunieron en Los Ángeles el miércoles para lanzar una iniciativa que destaca el abuso sexual infantil que Erik y Lyle sufrieron. Baralt dijo: “En nombre de toda nuestra familia, es un honor presentar nuestra nueva coalición, ‘Justicia para Erik y Lyle'”. La conferencia de prensa marcó la mayor reunión oficial de parientes de ambos lados de la familia desde que el fiscal de distrito George Gascón comenzó a revisar el caso a principios de este año. Los familiares fueron acompañados por el abogado de Erik y Lyle, Mark Geragos, quien enfatizó que las sentencias de los hermanos no consideraron completamente el abuso sexual traumático de una década que sufrieron a manos de su padre.
Nuevo llamado a la acción
A 35 años del suceso, la familia instó a los simpatizantes a visitar su sitio web y firmar una petición que pide a la Oficina del Fiscal de Distrito que tome acción. Joan VanderMolen, hermana de Kitty, dijo que la decisión de la familia de lanzar la iniciativa surgió tras recibir un apoyo abrumador para los hermanos. “Quiero agradecer a todos los que se han puesto en contacto con nuestra familia en los últimos días y semanas preguntando cómo pueden ayudar”, dijo VanderMolen. “Tenemos una respuesta. Por favor, firme nuestra petición.”
Evidencia nueva y revisión del caso
“Justicia para Erik y Lyle” sigue al descubrimiento de nueva evidencia, que actualmente está bajo revisión por Gascón. Gascón le dijo a Newsweek que su oficina está revisando una carta de 1988 escrita por Erik a su primo Andy Cano sobre el presunto abuso sexual que sufrió por parte de su padre. La nueva evidencia también incluye una declaración de un exmiembro de Menudo que afirma que también fue agredido sexualmente por José. Con una audiencia programada para el 29 de noviembre, Newsweek se puso en contacto con la oficina del fiscal para verificar algún progreso en una decisión tras la conferencia de prensa de la familia. Aún no han respondido.
Entendimiento cambiante sobre el abuso sexual
El sitio web de la iniciativa indica: “En las últimas tres décadas, la comprensión de la sociedad sobre el impacto del abuso sexual en las víctimas – incluyendo a las víctimas masculinas – ha evolucionado significativamente. Sin embargo, la sentencia de Lyle y Erik refleja la percepción desactualizada de que los niños no pueden ser víctimas de abuso sexual. Ahora, con nueva evidencia ante el Fiscal del Condado de Los Ángeles, la familia de Lyle y Erik está luchando por una nueva sentencia.”
VanderMolen dijo que si los hermanos fueran juzgados hoy, el tribunal permitiría evidencia del abuso de su padre, proporcionando un contexto crucial para sus acciones. “En los años posteriores a su condena, la comprensión de la sociedad sobre el abuso sexual y su impacto psicológico ha crecido significativamente”, dijo VanderMolen. “Entendemos que una persona no necesita encajar en un molde específico, ya sea por género o estado socioeconómico, para experimentar abuso.”
Los fiscales argumentaron que no había pruebas de abuso, ya que la evidencia de la agresión había sido excluida por el juez durante su segundo juicio en 1995. Alegaron que los hermanos estaban motivados por la codicia, buscando heredar la multimillonaria fortuna de sus padres, una afirmación que la defensa negó.
Según el sitio web de la iniciativa, el abuso sexual es un problema generalizado y poco reportado, particularmente para niños y hombres. La investigación muestra que al menos 1 de cada 6 hombres ha experimentado abuso sexual o agresión, ya sea en la infancia o en la edad adulta. Este número probablemente está subestimado, ya que muchos hombres nunca revelan su abuso debido al estigma social, el miedo o la vergüenza.
Para los sobrevivientes masculinos, los impactos del abuso pueden ser profundos y duraderos. Los estudios han demostrado que los hombres que han experimentado abuso sexual tienen un mayor riesgo de problemas de salud mental como el trastorno de estrés postraumático (TEPT), depresión, abuso de sustancias e incluso pensamientos suicidas. El trauma puede afectar sus relaciones, logros académicos y éxito profesional, con muchos sobrevivientes luchando en silencio durante años.
Los hermanos se han dedicado a crear conciencia sobre las víctimas masculinas de agresión sexual durante su tiempo en prisión.
Fuente y créditos: www.newsweek.com
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