El ascenso mediático de Nikolai Lukashenko
El hijo más joven del presidente bielorruso Alexander Lukashenko, Nikolai, ha aparecido con más frecuencia en los medios recientemente. El joven de 20 años, que solía acompañar a su padre en visitas estatales, ahora parece influir en la política nacional.
Conciertos y propaganda política
Nikolai Lukashenko actualmente recorre el país para ofrecer conciertos de piano en un “maratón de unidad”, eventos propagandísticos destinados a ganar apoyo para la nominación de su padre a otro mandato. El presidente Lukashenko ha gobernado el país durante 30 años, y se celebrará una elección presidencial anticipada en Bielorrusia el 26 de enero.
Cuando el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy declaró a principios de este año que Lukashenko se había disculpado por el inicio de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania en la primavera de 2022, la secretaria de prensa de Lukashenko, Natalia Eismont, explicó que esto se debió únicamente a “una reacción emocional” por parte de su hijo Nikolai. Según Eismont, el número de Zelenskyy está almacenado entre los contactos personales de Nikolai Lukashenko. Su padre facilitó que las tropas rusas llevaran a cabo la invasión del país vecino.
Presencia desde la infancia
Nikolai Lukashenko apareció por primera vez en público en 2008, a la edad de casi cuatro años, acompañando a su padre en un “día de limpieza nacional” en un sitio de construcción de Minsk Arena. Más tarde, Lukashenko anunció que Nikolai era su tercer hijo. La madre del niño, cuya identidad se había convertido en un secreto a voces, es Irina Abelskaya, directora de un centro de salud donde los líderes del país reciben tratamiento médico.
Desde una edad temprana, el dictador bielorruso llevó a su hijo más joven consigo en viajes por el país y visitas oficiales al extranjero. Como niño, Nikolai conoció al presidente estadounidense Barack Obama, al presidente chino Xi Jinping, al Papa Francisco y a otros líderes mundiales.
En junio de 2022, terminó la escuela y comenzó a estudiar en la Universidad Estatal de Bielorrusia en un departamento de “biotecnología” creado especialmente para él en cooperación con la Universidad de Pekín, con el fin de que Nikolai pudiera recibir diplomas de ambas instituciones, según su padre.
Sanciones por violaciones de derechos humanos
Durante las protestas masivas contra la falsificación de las elecciones presidenciales por parte de Alexander Lukashenko en 2020, Nikolai, de 16 años, apareció con su padre en uniforme completo sosteniendo un fusil. Posteriormente, estuvo presente durante el interrogatorio del político opositor Viktor Babariko y otros prisioneros políticos en el centro de detención del servicio secreto bielorruso.
Bielorrusia ha estado bajo sanciones de países occidentales durante mucho tiempo por violaciones políticas y de derechos humanos. En agosto de 2024, en el cuarto aniversario de las controvertidas elecciones de 2020, Canadá incluyó a varias personas en una lista de sanciones, incluido Nikolai Lukashenko. El gobierno de Ottawa citó graves violaciones sistemáticas de derechos humanos tras esas elecciones.
En noviembre de 2024, Nikolai Lukashenko dio una entrevista a los medios estatales bielorrusos en la que explicó que es como su padre: “Algunos dicen que soy diferente a mi padre, pero o no me conocen o no conocen a mi padre. No puedo ser un opositor del estado, del jefe de estado, porque soy una copia absoluta de él”.
Reubicación en los medios
Desde 2007, Alexander Lukashenko, quien es objeto de un culto personal nacional, ha indicado que está preparando a su hijo más joven como su sucesor porque es “único”. Recientemente, el autócrata bielorruso ha hablado sobre la necesidad de un cambio generacional. “Debemos preparar a nuestros hijos que asumirán, protegerán y valorarán Bielorrusia”, explicó el 7 de enero durante una visita a una iglesia en Logoisk, cerca de la capital, Minsk.
“Nikolai ha crecido y sus actividades mediáticas apuntan a una reubicación”, dice Fyodor Pavlyuchenko, editor en jefe del portal de noticias Reform.news y jefe de un proyecto de YouTube que critica a Lukashenko. “Se le presenta como una copia de Lukashenko y un posible sucesor”, añade, señalando que la propaganda ahora servirá para fortalecer este mensaje entre los bielorrusos.
Más que apoyo de campaña?
El politólogo Valery Karbalevich, por otro lado, cree que la creciente presencia mediática de Nikolai Lukashenko es meramente una campaña electoral para su padre y que no hay planes políticos para el joven. “La cuestión del sucesor solo se plantea cuando un jefe de estado se retira. Pero Lukashenko no tiene planes de dejar el poder”, dice Karbalevich.
Bielorrusia se asemejaría a otros estados postsoviéticos donde los hijos han sucedido a sus padres como jefes de estado solo después de haber ocupado una posición importante que justifique la reclamación al poder, dice Karbalevich. Por ejemplo, antes de asumir el cargo de presidente en Azerbaiyán, Ilham Aliyev dirigía una importante empresa petrolera. En Turkmenistán, Serdar Berdimuhamedov también ocupaba importantes posiciones antes de convertirse en presidente.
Pero en Bielorrusia, el hijo mayor de Lukashenko, Viktor, solo dirige el Comité Olímpico Nacional, que es una organización social, mientras que Nikolai Lukashenko no tiene ningún papel oficial, señala Karbalevich. Esto deja pocas indicaciones de que uno de los hijos de Lukashenko asumirá el poder, dice.
Un futuro incierto
El periodista Pavlyuchenko, por otro lado, cree que no será necesario que Nikolai Lukashenko ocupe un papel para ascender. Su padre ha construido “todo un clan” alrededor de su hijo más pequeño. “Lo convertirán en un príncipe, una deidad que ha recibido todo por naturaleza, lo que muchos solo obtienen a través de una carrera política”, dice Pavlyuchenko. La mayor desventaja de Nikolai en este escenario es su juventud, añade, calificándolo como una carrera contra el tiempo en medio de la incertidumbre sobre cuanto tiempo más resistirá el presidente antes de entregar el poder. En los últimos años, han circulado rumores sobre la mala salud del dictador de 70 años.
Pavlyuchenko también no descarta la posibilidad de que Nikolai enfrente competencia de sus hermanos mayores, Viktor y Dmitry, en un drama de sucesión. Pero carecen del carisma necesario, añade. “Cuando aparecen frente a las cámaras, se puede ver que son peores copias de su padre”.
Fuente y créditos: www.dw.com
Cats: World