Crisis de cancelaciones en Anapa
Una ola de cancelaciones está arrasando los spas y campamentos infantiles en Anapa, una localidad rusa en el mar Negro, ya que muchos rusos abandonan sus planes vacacionales en la región sur de Krasnodar debido a la contaminación provocada por un enorme derrame de petróleo en diciembre de 2024 que ha llegado a las playas.
Según el canal de Telegram Kub Mash, “los padres no quieren enviar a sus hijos a la costa peligrosa”. También se informó que las empresas que habían otorgado vales de viaje a sus empleados como bonificaciones ahora estaban exigiendo reembolsos.
Impacto significativo en los tratamientos de salud infantil
Hablando con el periódico ruso Parlamentskaya Gazeta, la presidenta del Comité de Asuntos Familiares de la Duma Estatal de Rusia, Nina Ostanina, dijo que las reservas en los retiros recreativos y de salud para niños en Anapa habían caído más de un 27% en enero y un 40% para el verano.
Desastre ambiental continuo
El derrame de petróleo comenzó cuando una tormenta golpeó a dos petroleros rusos envejecidos que viajaban por el estrecho de Kerch, que separa Rusia de Crimea, una península en Ucrania actualmente ocupada por Rusia. Un barco se hundió y el otro fue dañado al encallar.
El combustible sigue filtrándose al mar desde el petrolero hundido, y las autoridades rusas informaron que no podían soldar la parte dañada del barco porque estaba demasiado cerca del petróleo.
Según informes oficiales, hasta 5,000 de las 9,200 toneladas de mazut, un producto petrolero denso y de baja calidad, que transportaban los petroleros pueden haber filtrado ya al mar. El mazut se ha asentado en el lecho marino y ha llegado a la costa, contaminando al menos 50 kilómetros (31 millas) de costa, principalmente alrededor de Anapa.
Mientras que el Ministerio de Emergencias de Rusia afirma que no hay un método efectivo para limpiar este tipo de petróleo, expertos ambientales han señalado que métodos apropiados han estado disponibles desde 2002, cuando el petrolero Prestige que transportaba un petróleo pesado similar se hundió frente a la costa española, contaminando unos 2,000 kilómetros de costa.
Consecuencias severas para la vida silvestre y la salud humana
Eugene Simonov, del grupo de trabajo sobre las Consecuencias Ambientales de la Guerra en Ucrania, dijo a DW que podría tomar una década para que los ecosistemas se recuperen. “Este derrame de petróleo podría tener consecuencias desastrosas para algunas especies”, afirmó.
La organización ambiental Greenpeace informó sobre la muerte de 32 delfines y 1,355 aves desde principios de enero. Anna Jerzak, una experta de la organización para Europa Central y del Este, dijo a DW que las altas concentraciones de hidrocarburos tenían un efecto tóxico en los peces, interrumpiendo las cadenas alimentarias y causando una disminución de las poblaciones.
“En el largo plazo, los productos petroleros envenenan las algas marinas, lo que destruye los hábitats de varios organismos”, comentó. El derrame de petróleo está afectando ecosistemas enteros y representa una amenaza para los humanos también.
Mirando hacia el próximo verano, Simonov dijo que el combustible pesado también planteaba riesgos para la salud de los nadadores. “Las personas pueden experimentar un mal olor, para muchos, esto empeorará problemas respiratorios existentes, y todo esto puede tener efectos cancerígenos”, dijo.
Jerzak de Greenpeace también advirtió que las emisiones tóxicas, las reacciones alérgicas y la inflamación de la piel también eran probables.
Voluntarios participan a pesar de la inacción del gobierno
Alrededor de 10,000 voluntarios están ayudando con el movimiento de limpieza, que surgió de manera espontánea, según el ecólogo Evgeny Vitishko.
Hasta ahora, se han rescatado alrededor de 2,500 aves, dijo. “Eso es aproximadamente la mitad de las aves afectadas por el derrame de petróleo, lo cual es más alto que el promedio global. Normalmente, solo se rescata alrededor del 10-12%”, afirmó Vitishko, añadiendo que estaba presionando por un centro de rehabilitación de aves donde la fauna rescatada pudiera estar durante tres a seis meses.
“Hace un mes que nos queda antes de que no haya más aves que salvar”, afirmó.
Uno de los ayudantes explicó que la red de voluntarios inicialmente fue financiada por donaciones. Con el tiempo, los voluntarios comenzaron a pedir a los donantes que pidieran los suministros y equipos necesarios en línea y los enviaran directamente al centro de voluntarios. Todos los voluntarios reciben alojamiento y provisiones gratuitas de hoteles locales, cuya propia supervivencia depende de la próxima temporada de verano.
Exigen una supervisión más estricta
Inicialmente, las autoridades habían proporcionado a los voluntarios trajes de protección de China, según se enteró DW, y la distribución de equipo especial fue lenta, por decir lo menos.
Pero, incluso si estos problemas se han resuelto desde entonces, muchos voluntarios tienen la impresión de que ellos, no el estado, están haciendo la mayor parte de la limpieza. Se quejan de que los representantes del gobierno solo interfieren en su trabajo.
Aparentemente, en una reunión ministerial, el presidente ruso Vladimir Putin instó a los funcionarios a participar más activamente en las tareas de limpieza.
Cuando funcionarios del Ministerio de Medio Ambiente de Rusia visitaron Anapa a principios de enero, causaron un escándalo al liberar unas 160 aves rescatadas sin consultar a los voluntarios locales con anticipación.
“Lo hicieron como una maniobra de relaciones públicas”, dijo un ayudante a DW. El incidente se tornó trágico, cuando casi todas las aves que habían sido liberadas fueron encontradas muertas a lo largo de la costa al día siguiente. Los expertos explicaron que el petróleo había dañado el revestimiento de aislamiento natural en las plumas de las aves, las cuales no habían tenido la oportunidad de recuperarse en tan poco tiempo.
Tras el trágico evento, el centro de voluntarios instaló un representante responsable de hacer la conexión con las autoridades y los medios. Pero los ayudantes dicen que el representante es en realidad responsable de monitorear el contenido de sus charlas grupales internas.
Un voluntario recuerda que al principio había una atmósfera abierta en el centro. “Me sorprendió lo amables que eran las personas entre sí. Algunos hacían el trabajo pesado, otros lavaban aves y otros distribuían equipo de protección”, relató. “Era genial ser parte de esto”.
Pero una vez que las autoridades comenzaron a presionar al centro de voluntarios, empezó a dudar de las estadísticas oficiales y las prácticas de trabajo. En su lugar, el ayudante sospecha que las autoridades locales están tratando de ocultar cifras y actividades.
“A pesar de la comida y el alojamiento gratis, apenas me quedan ahorros”, dijo. Pero aún quería quedarse, si acaso por la sensación de contribuir a algo importante.
Fuente y créditos: www.dw.com
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