La importancia de un contador para pequeños negocios
Una de las mejores partes de administrar un pequeño negocio es el orgullo de haberlo logrado por ti mismo. No todos tienen la visión y el impulso requeridos para tomar un concepto y hacerlo realidad. La idea de contratar personal externo, como un contador, puede parecer un poco desalentadora.
“Al principio, cuando estás comenzando, es manejable llevar un registro tú mismo o usar software básico. Pero a medida que tu negocio crece, podrías encontrar que manejar todas esas facturas, pagos y gastos se vuelve abrumador”, explica Steven Kibbel, planificador financiero certificado y fundador de Kibbel Financial. “He visto propietarios de pequeños negocios que esperan demasiado para abordar esto y terminan con errores en sus libros, pagos perdidos a proveedores o incluso reportando incorrectamente sus ingresos.”
Señales de que necesitas un contador
Seguramente te sientes orgulloso de dirigir un negocio ágil, pero un buen contador debería ser visto como una inversión, una que te ayuda a rastrear y retener más de tu dinero duramente ganado y libera tu tiempo para que te enfoques en lo que mejor sabes hacer. Si te has estado preguntando si necesitas ayuda externa para rastrear y gestionar los gastos e ingresos de tu pequeño negocio, aquí te mostramos las señales que indican que podría ser el momento de contratar a un contador.
Cuando no puedes seguir el flujo de caja
“A medida que tu negocio crece, gestionar tus propios libros puede volverse rápidamente abrumador. Podrías perder de vista a quién le debes dinero, perder plazos de facturas de proveedores y luchar por rastrear con precisión el flujo de caja”, dice Alex Cook, VP de Impuestos para Pequeñas Empresas en Block Advisor. “La gestión confiable del flujo de caja es crucial para tomar decisiones empresariales informadas que aseguren el éxito a largo plazo. Sin embargo, si la contabilidad no es tu fuerte, puede obstaculizar tu progreso.” Según Cook, desentrañar desorden financiero por tu cuenta puede consumir un tiempo valioso que podría ser mejor empleado en ventas y generación de ingresos. Si esto te suena familiar, podría ser hora de subcontratar tu contabilidad a un proveedor de confianza.
Cuando la contabilidad consume tu tiempo
Otro gran indicio es cuando la contabilidad comienza a consumir el tiempo que deberías dedicar a dirigir y hacer crecer tu negocio. “Trabajé con una clienta que tenía una pequeña tienda minorista, y ella me dijo que se quedaba despierta hasta la medianoche cada noche tratando de conciliar sus cuentas. Ese es un tiempo que podría haber pasado en conseguir nuevo inventario o en promocionar su negocio”, explica Kibbel. “Contratar a un contador le permitió enfocarse en el lado creativo de su negocio, sabiendo que sus finanzas estaban en buenas manos.”
Cuando te expandes internacionalmente
La complejidad financiera es otro problema. Piénsalo de esta manera: Si comienzas a contratar empleados o expandirte a nuevos mercados, empezarás a lidiar con impuestos de nómina, rastreo de inventario o incluso cumplimiento de impuestos sobre ventas en múltiples estados, en lo cual podría no estar completamente competente. Aquí es donde un contador se vuelve invaluable, ya que pueden manejar esos detalles mientras mantienen tus registros claros y precisos. “Una de mis clientas, que dirige un pequeño negocio de comercio electrónico, llegó a este punto cuando comenzó a vender internacionalmente. Los problemas fiscales y de divisas se complicaron rápidamente, y se dio cuenta de que no era algo que podía seguir haciendo por su cuenta”, dice Kibbel.
Cuando la temporada de impuestos se convierte en un dolor de cabeza
“La temporada de impuestos es un gran punto de dolor para muchos propietarios de pequeños negocios”, dice Kibbel. “Si te encuentras apresurándote para reunir recibos y registros, o peor aún, perdiendo deducciones porque tus libros no están organizados, probablemente sea hora de contratar a alguien. He visto propietarios de negocios ahorrar miles en impuestos porque un contador asegura que todo esté categorizado correctamente y listo para que el CPA lo revise”, agrega Kibbel. “Y si alguna vez te ha golpeado una penalización por perder un plazo de impuestos, sabes lo costoso que puede ser.”
Fuente y créditos: mashable.com
Cats: Tech