Un épico documental sobre la maternidad
Uno de los descubrimientos más encantadores del BFI London Film Festival (LFF) de este año ha sido Motherboard, una épica familiar que abarca 20 años, durante los cuales la directora Victoria Mapplebeck documentó su vida con su hijo Jim. La cineasta ha estado capturando imágenes desde el momento en que se enteró de que estaba embarazada, pasando por el turbulento comienzo de la adolescencia de Jim, marcado por un intento de reconectar con su padre y por el diagnóstico de cáncer de su madre, hasta su vigésimo cumpleaños. Este íntimo documental se siente como la versión real de Boyhood de Richard Linklater, una película ganadora del Oscar que revisita al mismo elenco a lo largo de 12 años; no sorprende que Boyhood haya sido una referencia para Motherboard.
La evolución tecnológica como parte de la narrativa
A lo largo de los años, Mapplebeck filmó usando seis generaciones de iPhone, desde el iPhone 6 de 2014 hasta el iPhone 15 de 2023. Pero más que una simple herramienta de filmación, la evolución de la tecnología en las últimas dos décadas se incorpora casi de manera táctil en la historia. La primera vez que se fotografió a Jim fue a través de una ecografía médica, que vemos al principio del filme. Más tarde, los avances en las imágenes médicas regresarían durante el tratamiento del cáncer de Mapplebeck cuando, en una escena particularmente poderosa, ella confronta sus miedos al mirar imágenes microscópicas de sus propias células cancerosas. En una narración, medita sobre la innegable belleza de las pequeñas células rosas e invita al público a compartir esta experiencia estéticamente deslumbrante. La tecnología en Motherboard es, al parecer, la manera de Mapplebeck de observar, conectar y dar sentido al mundo —las cosas que se aman y las que se temen.
Memorias digitales y la interacción entre cine y tecnología
Los smartphones también funcionan como portadores de recuerdos, y Mapplebeck hace pleno uso de este archivo vivo; desde mensajes de texto y notas de voz, hasta videos publicados en las cuentas de Snapchat e Instagram de Jim, la historia de la vida de la familia se conserva en dispositivos digitales. Esta intersección entre el cine y el mundo digital ha estado presente en el trabajo de Mapplebeck mucho antes de su película larga. En 2014, escribió y dirigió TEXT ME, una plataforma interactiva en línea donde se anima a los usuarios a recoger, curar y compartir los archivos de su pasado digital. En 2019, documentó su diagnóstico de cáncer de mama y el tratamiento posterior en un proyecto de realidad virtual interactivo llamado The Waiting Room. En el ínterin, dos cortometrajes, que sentaron las bases para Motherboard, exploraron diferentes aspectos de la maternidad soltera: en 160 Characters, Mapplebeck revisita la historia de su relación con el padre ausente de Jim a través de viejos mensajes almacenados en su teléfono Nokia, mientras que Missed Call (2017) explora la decisión de ella y Jim de reconectar con él.
Charlas sobre la creación del documental
Durante el LFF, Mashable habló con Mapplebeck sobre la realización de Motherboard, el papel de la tecnología en su trabajo y la revalorización del tropo del “viaje épico”.
Teodosia Dobriyanova: En tu trabajo, a menudo exploras las posibilidades de la tecnología y los nuevos medios. ¿Qué es lo que hay en estas herramientas que resuena con tu práctica?
Victoria Mapplebeck: Probablemente estaba muy interesada e inspirada por Tangerine de Sean Baker, que fue el primer drama de largo metraje que se hizo, creo, con el iPhone 6. En ese momento, comencé todo este proyecto al escribir, porque puedes escribir sin dinero, y eso es algo genial cuando eres una cineasta que está muy fuera de todo ese ciclo de comisionado. Así que comencé a escribir una historia corta con todos los mensajes de Nokia que había archivado sin querer entre mí y el padre de Jim. Pensé que podría ser realmente interesante dar vida a una historia de teléfono con un teléfono. Eso fue en 2015.