Desafíos Tras el Huracán Helene en Carolina del Norte
SWANNANOA, N.C. (AP) — Emily Russell recuerda sentirse esperanzada después de conseguir una cita con la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA) poco después de que el Huracán Helene devastara su hogar en Swannanoa, Carolina del Norte. Sin embargo, tras varias solicitudes de asistencia que fueron denegadas o quedaron pendientes, Russell dice que la agencia ha sido de “ninguna ayuda” para su familia después de la tormenta a finales de septiembre. Aún aturdida en un mundo dado vuelta por la tormenta más destructiva en la historia del estado, se encuentra abierta a la sugerencia del presidente Donald Trump sobre “deshacerse” de FEMA.
Frustración con la Asistencia de FEMA
Esa es una opinión común en las montañas del oeste de Carolina del Norte, donde vivir en un remolque con suministros limitados durante meses puede poner a prueba la paciencia de cualquiera. Russell, quien al igual que muchos otros no tenía seguro contra inundaciones, soportó esas tensiones mientras se preparaba para el nacimiento de su hijo, pero luego voluntarios intervinieron para reconstruir su hogar. Ahora, puede acunar a su pequeño bebé en sus brazos en su recién construida terraza —con vista a un montón de escombros en descomposición y dos letreros de Trump-Vance colocados en un poste en su jardín.
La frustración con los esfuerzos de asistencia temporal se ha visto exacerbada por la confusión sobre de dónde debería provenir la ayuda a largo plazo. FEMA está destinada a ser una primera línea, proporcionando vivienda temporal y financiación para reparaciones mientras que el seguro cubre la mayor parte de la factura. No es el mensaje que los residentes escucharon inicialmente, cuando políticos, incluido el entonces presidente Joe Biden, quien recorrió la zona dañada, prometieron a los residentes que tendrían lo que necesitaran. A medida que pasa el tiempo, la realidad de la recuperación a largo plazo se ha complicado.
Las Repercusiones de la Crítica a FEMA
Para Russell y muchos otros, el hecho de que Trump dijera que consideraría eliminar FEMA tenía sentido. Sin embargo, para algunos expertos y funcionarios, eso podría causar más problemas de los que resolvería. Días después de que Trump asumió el cargo el 20 de enero, evaluó las consecuencias de los incendios forestales en California y el huracán en Carolina del Norte y sugirió que los estados gestionaran principalmente la respuesta a los desastres naturales. Como candidato, había menospreciado el trabajo de FEMA en los estados del sur afectados por Helene. Esa crítica, que comenzó casi tan pronto como el viento dejó de soplar, no ha cesado.
Más recientemente, FEMA fue criticada por el asesor de Trump, Elon Musk, por los pagos para reembolsar a la ciudad de Nueva York por los costos de hotel para migrantes. Cuatro empleados de FEMA fueron despedidos, acusados de eludir al liderazgo para realizar las transacciones, las cuales han sido estándar durante años a través de un programa que ayuda con los costos de atención a un aumento en la migración.
La Ayuda Financiera de FEMA
El gobierno de Carolina del Norte estimó que Helene causó un récord de $59.6 mil millones en daños. FEMA ha contribuido con casi $380 millones a través de subvenciones de asistencia pública a gobiernos estatales y locales, así como aproximadamente $372 millones directamente a los habitantes de Carolina del Norte hasta el 11 de febrero, según la agencia. Las responsabilidades de FEMA incluyen asistencia financiera directa a individuos y reembolsos a los gobiernos por tareas de recuperación como la eliminación de escombros y la reconstrucción de caminos.
Russell estaba confundida cuando le negaron su solicitud a FEMA, especialmente después de que un inspector le dijera que la casa era una pérdida total. Las aguas del diluvio arrancaron el costado de su casa, y el barro pesado se filtró adentro, deformando los tablones del suelo y dejando la mayoría de las cosas irreparables. Pensó que la casa en la que creció sería demolida.
Russell llamó a FEMA y habló con representantes en persona sobre su solicitud denegada. Dijo que le dijeron que necesitaba recibos de ciertos artículos personales, los cuales no tenía. “Ser continuamente informada que está pendiente o no aprobada, es solo, es solo una sensación devastadora,” dijo Russell. “Quiero decir, simplemente te sientes perdida.”
En el condado de Buncombe, donde vive Russell, aproximadamente el 70% de los propietarios que se registraron en FEMA recibieron algún nivel de asistencia, según los datos de la agencia. Aproximadamente el 91% de los aprobados recibieron hasta $10,000, mientras que alrededor del 3.6% obtuvo entre $25,000 y un pago máximo que probablemente superaría un poco los $40,000.
Danny Bailey, un jubilado de 61 años del condado Buncombe, dijo que recibió $42,500 después de perder prácticamente todo en la inundación, incluyendo el remolque en el que vivía, la casa móvil de su hermana y un granero. Su familia se había mudado a la propiedad en 1968.
Bailey ya gastó parte de su dinero en necesidades, como propano para sobrevivir el invierno. Vive en un remolque donado en su propiedad, ahora un terreno fangoso y lleno de surcos, y dijo que FEMA “debería haber hecho más.” “Si así es como son, debería deshacerse de ellos,” dijo Bailey sobre Trump, cuya victoria en Carolina del Norte lo ayudó a triunfar en noviembre.
Bailey tuvo problemas para obtener el dinero. Unos días después de Helene, dijo que un inspector de FEMA vino a su propiedad y le dijo que fuera en línea para solicitar asistencia por desastres, pero Bailey no tenía computadora ni servicio celular confiable. Viajó casi 100 millas al este hacia Statesville para usar la computadora de su sobrino, dijo Bailey, y luego tuvo problemas para obtener respuestas claras de FEMA sobre el estado de su solicitud. Finalmente, recibió su dinero. “Su actitud era, ya sabes, esto te pasó, pero depende de ti solucionarlo. Y yo no soy el que lo causó,” dijo riendo.
Las quejas sobre el proceso de solicitud de FEMA son comunes debido a los obstáculos administrativos establecidos para garantizar la elegibilidad de los solicitantes, dijo Miyuki Hino, profesora de planificación urbana y regional en la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill. Las personas también pueden creer que FEMA debería proporcionar más asistencia cuando su función principal es satisfacer necesidades inmediatas como refugio, dijo Hino.
El Futuro y las Implicaciones de la Eliminación de FEMA
Siempre ha habido una tensión subyacente sobre el papel del gobierno federal en la respuesta a desastres naturales, pero Hino dijo que la creciente politización de la agencia podría atribuirse a la creciente frecuencia de desastres costosos causados por el cambio climático. Disolver FEMA podría crear problemas cuando los desastres se extienden más allá de las fronteras estatales o cuando las localidades necesitan experiencia en desastres que no están acostumbradas a enfrentar. En general, eliminar FEMA probablemente ralentizaría el proceso de recuperación para futuros desastres, afirmó.
La posible eliminación de FEMA preocupa a Dalton George, el alcalde pro tempore de Boone, un pueblo montañés en el condado de Watauga que fue devastado por Helene. A pesar de las frustraciones comprensibles, dijo que la agencia se movió rápidamente para ayudar. Ha contribuido con dinero para restauraciones de hogares, así como para mantener a varias familias en hoteles bajo su programa de albergue transitorio, dijo. “Parece que la gente está más en contra de FEMA que realmente buscando resolver algunos de estos problemas,” dijo George.
Las responsabilidades se trasladarían parcialmente a los gobiernos locales, y George dijo que pueblos como Boone no tienen los recursos para eso. Las organizaciones privadas tendrían que involucrarse más de lo que han hecho, dijo George, y ya están sobrecargadas.
Vickie Revis depende en gran medida de entidades privadas como iglesias para suministrar casi todo en su propiedad, incluyendo el remolque en el que vive con su esposo a lo largo del río Swannanoa. Su hogar de ocho años fue completamente arrastrado por el río —algo que solía asociar con belleza y paz pero que ahora relaciona con “terror.” “Es como un amigo que entró y te robó todo lo que tienes,” dijo Revis. Su proceso de restauración, sin embargo, se financiará en gran medida a través de FEMA, ya que Revis dijo que recibió más de $40,000. Dijo que no tuvo problemas con cómo la agencia manejó su situación.
En cambio, Revis habló en profundidad sobre el dolor con el que todavía vive: mascotas perdidas; posesiones significativas que desaparecieron; planes de expansión del hogar para acomodar a más miembros de la familia que no sucederán. Dijo que rara vez salió de su remolque hasta hace poco porque no podía soportar enfrentar la devastación. Ahora, es la reconstrucción lo que mantiene a Revis en marcha. ¿Cuánto tiempo continuará eso? “Lo que sea necesario,” respondió.
Fuente y créditos: www.huffpost.com
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