Más de 60 integrantes de las disidencias de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se desmovilizaron el sábado, tras haber enfrentado días atrás al Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la región del Catatumbo, al noreste del país. Este reciente brote de violencia ha dejado al menos 80 muertos y más de 40.000 desplazados, según informaron las autoridades.
El gobierno ha ofrecido una recompensa de 3.000 millones de pesos (más de 700 mil dólares) por información que conduzca a la captura de cuatro líderes del ELN: Nicolás Rodríguez Bautista, alias “Gabino”; Eliecer Herlinto Chamorro, alias “Antonio García”; Gustavo Aníbal Giraldo, alias “Pablito”; e Israel Ramírez Pineda, alias “Pablo Beltrán”.
Los 65 desmovilizados son parte del frente 33 de las disidencias de las antiguas FARC, de los cuales 15 son menores de edad. El comandante del Ejército, Luis Cardozo, detalló que 11 son venezolanos y el resto colombianos. Durante la operación, se incautaron 55 fusiles, dos ametralladoras, 25 pistolas, 5 morteros artesanales y otras 89 armas que ya no estarán disparando a los ciudadanos del Catatumbo.
La entrega de los disidentes en Tibú, Norte de Santander, es “una de las mayores desmovilizaciones” en los últimos nueve años, destacó el presidente Gustavo Petro. Aseguró que se respetarán sus derechos humanos. La región del Catatumbo, que es una zona fronteriza con Venezuela y donde el ELN y las disidencias de las FARC luchan por el control, fue declarada en “estado de conmoción” el viernes, restringiendo derechos como la libre circulación, entre otras medidas.
La violencia, que el Estado atribuye principalmente al ELN, se intensificó recientemente debido al control territorial estratégico para actividades ilícitas relacionadas con el narcotráfico. El gobierno también suspendió hace una semana las negociaciones de paz con esta guerrilla.
Según las Naciones Unidas, la escalada violenta ha dejado 60 muertos verificados, mientras que la gobernación de Norte de Santander reporta al menos 80. Solo 41 cuerpos han sido identificados hasta ahora debido a la difícil recuperación por la violencia en la zona.
Las fuerzas militares anunciaron la movilización de vehículos blindados para reforzar la seguridad en los lugares donde ocurrieron los primeros enfrentamientos entre el Ejército y el ELN, según confirmó el ministro de Defensa, Iván Velásquez. En un recorrido por los albergues en Tibú, se observó que los desplazados se encuentran en condiciones “aceptables” mientras se trabaja en estabilizar la zona para permitir su regreso a casa.
El ministerio de Defensa de Venezuela anunció un plan conjunto de tres meses con Colombia para “consolidar la paz” en la frontera, donde todavía hay unidades militares para evitar acciones de grupos armados ilegales. Esta decisión se tomó en una reunión entre el ministro Velásquez y su homólogo venezolano, Vladimir Padrino.
Además, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, después de entregar 295 carpas para los desplazados, calificó las acciones del ELN como “sangrientas, inhumanas y violentas” contra la población civil. La Defensora del Pueblo advirtió que el desplazamiento masivo en el Catatumbo podría ser el más grande en un solo evento en el país desde 1997 y lanzó una nueva alerta por los “graves riesgos” que enfrentarían los civiles en otros departamentos del sur y sureste de Colombia debido a la fragmentación de las disidencias de las FARC.
Fuente y créditos: www.vozdeamerica.com
Cats: Colombia