La polio es una enfermedad viral altamente contagiosa causada por el virus de la polio. Puede causar discapacidad permanente e incluso la muerte, especialmente en niños menores de cinco años.
Hay dos tipos de polio presentes en el mundo hoy en día: el poliovirus salvaje y el poliovirus derivado de la vacuna. Este último proviene de una vacuna oral contra la polio, conocida como la vacuna Sabin, o OPV.
El poliovirus salvaje ha sido erradicado en la mayoría de los países, excepto en Afganistán y Pakistán. Se ha encontrado poliovirus derivado de la vacuna en Yemen y África central.
Tanto las formas salvajes como las derivadas de la vacuna tienen tres tipos de virus: tipos 1, 2 y 3.
Aunque la polio derivada de la vacuna puede tomar la forma de cualquiera de los tres tipos, el tipo 1 es la única forma restante del poliovirus salvaje.
Los tipos 2 y 3 fueron declarados erradicados en 2015 y 2019.
Aunque todos los tipos de poliovirus salvaje pueden causar los mismos síntomas, hay diferencias en cuánto dañinos pueden ser, y la inmunidad a un tipo no protege contra los otros tipos.
¿Cuáles son los síntomas?
La mayoría de las personas infectadas con polio son asintomáticas. Aproximadamente una de cada cuatro personas experimenta síntomas similares a los de la gripe, como dolor de garganta, fiebre, dolores de cabeza o dolor de estómago. Generalmente, estos síntomas desaparecen por sí solos después de dos a cinco días.
Aunque raro, un porcentaje muy pequeño, menos del 1%, de las personas infectadas con el poliovirus experimentan síntomas muy peligrosos, como parálisis permanente, que puede llevar a una discapacidad permanente, e incluso la muerte cuando el virus afecta a los músculos requeridos para la respiración.
A veces, los niños que parecen haberse recuperado completamente pueden desarrollar más tarde, como adultos, el síndrome post-polio, caracterizado por nuevos dolores musculares, debilidad o incluso parálisis.
¿Cómo se transmite la polio?
El virus infecta los intestinos y la garganta de una persona. Puede sobrevivir allí durante varias semanas. Se propaga a través de una comunidad mediante el contacto con las gotas respiratorias o las heces de una persona infectada.
En lugares con malas condiciones sanitarias, el virus también puede contaminar los alimentos y el agua potable.
Las personas infectadas pueden transmitir el virus a otros justo antes de que aparezcan los síntomas y hasta dos semanas después.
¿Dónde está presente la polio hoy en día?
La polio aún no ha sido erradicada en todo el mundo: la forma salvaje del virus todavía existe en Afganistán y Pakistán. Y aunque África ha sido considerada libre de polio salvaje desde agosto de 2020, se han reportado casos importados en Malawi y Mozambique.
En julio de 2022, Estados Unidos reportó su primer caso de polio derivado de la vacuna en una década. El poliovirus derivado de la vacuna también se detectó en muestras de aguas residuales en el Reino Unido e Israel. Fue un “recordatorio crudo de que si no logramos nuestro objetivo de erradicar la polio en todas partes, puede resurgir a nivel mundial”, dijo el Director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus en ese momento.
Más de cien países han sido declarados libres de polio gracias al desarrollo de vacunas contra la polio a mediados del siglo XX y a campañas globales de vacunación agresivas.
¿Cuáles son los dos tipos de vacuna contra la polio?
No hay cura para la polio, pero existen vacunas para prevenir la enfermedad: la vacuna oral contra la polio (OPV) y la vacuna inactivada contra la polio (IPV).
La vacuna oral contra la polio se administra como un líquido oral y ha sido clave para la erradicación internacional porque protege al individuo y detiene la propagación del virus. La OPV utiliza formas vivas pero debilitadas del poliovirus que están modificadas para no causar enfermedad en la persona que recibe la vacuna.
Pero si el virus debilitado de la OPV puede mantenerse vivo y circular en lugares con malas condiciones sanitarias, como en aguas residuales, donde hay un gran número de personas no vacunadas, puede mutar de nuevo a una forma del virus que causa enfermedad.
La vacuna inactivada contra la polio se administra como una inyección y es extremadamente efectiva para proteger al receptor de la enfermedad grave. Debido a que está inactivada, no puede causar poliovirus derivado de la vacuna. Sin embargo, a diferencia de la OPV, no detiene la propagación del virus si la persona ya está infectada.
La OPV es más barata que la IPV y no requiere ser administrada por un profesional de la salud. Pero cada vez más países están utilizando la IPV, debido al riesgo de poliovirus derivados de la vacuna.
Hay algunos tipos de cuidados que pueden ayudar con los síntomas causados por la polio, como el reposo en cama, analgésicos, asistencia respiratoria y terapia física.
Editado por: Clare Roth, Zulfikar Abbany
Este artículo fue publicado originalmente el 24 de octubre de 2022 y ha sido actualizado para reflejar eventos actuales. La actualización más reciente fue el 19 de julio de 2024, cuando se informó que se detectó polio en la Franja de Gaza.
Fuente y créditos: www.dw.com
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